El animal, de tan solo 10 o 12 centímetros, puede ser, no obstante, bastante peligroso.
En las imágenes se observa una mantis religiosa que decide atacar a la pequeña serpiente. Una vez la culebra se aproxima, el insecto se arroja sobre ella.
La víctima intenta escapar, pero no logra hacerlo. Al final, la serpiente queda paralizada y la mantis comienza a devorarla.
Etiquetas: