La jornada comenzó con la “fiesta electoral” de los chavistas, que lanzaron fuegos artificiales y se reunieron para bailar y tocar música una hora antes de la apertura de los centros de votación. A las seis de la mañana, hora de Caracas, los colegios abrieron sus puertas paulatinamente y, cuatro horas más tarde, el Consejo Nacional Electoral difundió el primer boletín en el que señalaba que el 95% de los centros ya estaban operativos.

La vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, fue la primera representante del Ejecutivo en emitir el sufragio. Al terminar, llamó a los ciudadanos a “votar masivamente” como una expresión en contra de las sanciones impuestas a Venezuela en últimos años, especialmente por parte de Estados Unidos. También señaló que el pueblo debía ejercer el derecho a voto para “rescatar” al poder al Legislativo de “aquellos que lo secuestraron”, refiriéndose a la oposición que ahora dirige la Asamblea Nacional.

Más tarde, el presidente Nicolás Maduro votó y apeló al diálogo entre los venezolanos para solucionar las diferencias que los separan. El mandatario lanzó una invitación a “los partidos que participaron en las elecciones, con los grupos políticos que no participaron en las elecciones, con todos los sectores económicos, con todos los sectores sociales del país para ver la agenda nacional”.

Durante su discurso a la prensa tras emitir su voto, el dirigente calificó la gestión de la Asamblea Nacional, en manos de la oposición, como “nefasta” porque “trajo la plaga de las sanciones”. Tras los comicios, el organismo será reconfigurado el 5 de enero.

Las dificultades para ejercer el derecho a voto, a causa de las medidas de seguridad por el coronavirus, inclinaron al Consejo Nacional Electoral por alargar una hora más el horario de apertura de los centros de voto. La agencia de noticias EFE indicó que la abstención llegó al 80%.

“Debido a que tenemos el reporte de que, para esta hora, se mantiene la concurrencia de electores en los centros de votación, hemos decidido en reunión de la directiva del CNE que estos centros podrán permanecer abiertos hasta las 7 de la noche o hasta que haya electores en la cola”, dijo el vicepresidente del organismo, Leonardo Morales.

La oposición del país, encabezada por Juan Guaidó, no participó en la elección por considerarla un “fraude”. En contrapartida, convocaron a una consulta nacional de carácter informal que ser realizará entre el 7 y el 12 de diciembre.

Observadores internacionales acompañaron el proceso

Algunos países y potencias, como la Unión Europea anunciaron que no reconocerán los resultados de las elecciones legislativas de este domingo. Estados Unidos fue uno de los más firmes opositores, con un mensaje del secretario de estado, Mike Pompeo, en el que decía que “los resultados anunciados por el régimen ilegítimo de Maduro no reflejarán la voluntad del pueblo venezolano”.

Sin embargo, fueron varios los observadores internacionales que asistieron a la jornada electoral. Uno de esos acompañantes fue el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, quien compareció este domingo ante periodistas en Caracas para manifestar su apoyo a las legislativas venezolanas y pedir el fin de las sanciones contra el país suramericano.

“Deseo que la UE haga una reflexión después de estas elecciones, que evalúe lo que ha dado de sí la política de sanciones”, dijo tras referirse al “fracaso” del presidente estadounidense, Donald Trump, en su política de sanciones contra Venezuela para presionar a Maduro a salir del poder. 

Otras personalidades políticas como Evo Morales, de Bolivia; Rafael Correa, de Ecuador; Fernando Lugo, de Paraguay y Manuel Zelaya, de Honduras también estuvieron en calidad de acompañantes internacionales en el país.

Rechazo de venezolanos en el extranjero

Durante la mañana de los comicios, varios detractores del Gobierno chavista radicados en Madrid, España, se manifestaron contra la validez de la votación. Leopoldo López, uno de los opositores más famosos, estuvo presente en la protesta.

“La información que nos llega de Venezuela es que todos los centros electorales están vacíos”, se trata de una “abstención crónica” como señal de rechazo a una convocatoria electoral “fraudulenta”, dijo a la prensa Leopoldo López, que llegó a España el 25 de octubre pasado tras escapar de su país.

También en Bogotá, la capital de Colombia, decenas de ciudadanos se reunieron en el Monumento a los Héroes para pedir el regreso de la democracia a Venezuela.

La abstención y la tensión política sin mayores incidentes marcaron una jornada electoral que arrojará los resultados de quién dirigirá la Asamblea Nacional a partir del 5 de enero.

Con EFE, Reuters y medios locales

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