Armenia considera obligatorio el despliegue de sistemas Iskander en su territorio
El presidente armenio subrayó que el despliegue de los sistemas de misiles tácticos Iskander en el territorio de Armenia es una medida forzosa. "Es una medida forzosa con el fin de equilibrar la situación militar en nuestra región", dijo en una entrevista con el director general de grupo mediático Rossiya Segodnya (matriz de Sputnik), Dmitri Kiseliov.
Agregó que el vecino Azerbaiyán "en los últimos años adquirió armas modernas con regularidad". "Nosotros no tenemos las posibilidades de Azerbaiyán, me refiero a las financieras, pero tratamos de estabilizar la situación, encontrar un antídoto", señaló. Los sistemas Iskander, explicó, "son precisamente este antídoto". "Por supuesto, no queremos una carrera de armamento, pero ¿qué otra cosa se puede hacer si se siguen recibiendo amenazas de guerra y de exterminio físico cada día?; se deben tomar las medidas apropiadas", dijo.
Subrayó que Armenia y Rusia tienen un acuerdo para el mantenimiento del equilibrio de fuerzas en la región. "Por supuesto sería mejor para la humanidad si no hubieran existido estos sistemas pero tienes que usarlos cuando te ves obligado", concluyó. El reforzamiento de la base militar rusa El presidente de Armenia, Serzh Sargsián, instó a potenciar la base militar rusa emplazada en su país en una entrevista a Sputnik. Armenia alberga una base rusa en la localidad de Gyumri, en el norte del país, que forma parte del sistema integrado de defensa antiaérea de la Comunidad de Estados Independientes (CEI). "Una base es suficiente, simplemente se le debe dotar de más capacidad", aseguró Sargsián.
Sargsián respondió así a la pregunta de si Armenia podría acoger más bases rusas en su territorio. Rusia mantiene en Gyumri sistemas de misiles antiaéreos S-300B y Buk-M1-2, así como cazas MiG-29, helicópteros de transporte Mi-8MT y de ataque Mi-24P. En 2010, Ereván y Moscú prolongaron hasta el año 2044 la vigencia del acuerdo sobre el emplazamiento de la base, además de ampliar el ámbito de su responsabilidad estratégica. A mediados de este noviembre, el presidente ruso Vladímir Putin dio luz verde a la propuesta de establecer con Armenia un grupo de tropas conjunto en el Cáucaso del Sur.
El anteproyecto del convenio correspondiente, que se firmaría por cinco años con prórrogas automáticas a menos que alguna de las partes quiera rescindirlo, proclama como objetivo garantizar la seguridad en la región del Cáucaso. El futuro grupo conjunto se encargaría de proteger las fronteras de Armenia y Rusia y repeler una agresión armada a cualquiera de estos países. Por el momento, no se especifica el número de los efectivos ni los lugares de su emplazamiento.
El papel de Rusia en el conflicto sirio Armenia apoya el proceder de Rusia al ayudar a Siria tras la solicitud emitida por esta, declaró el mandatario armenio. "Aprobamos completamente el hecho de que Rusia preste apoyo al Gobierno sirio tras su solicitud", apuntó Sargsián. La situación en Nagorno Karabaj El arreglo del conflicto en Nagorno Karabaj es posible sólo a través de un compromiso, declaró el presidente de Armenia. "Por supuesto, hay una solución, y entendemos que esta debe basarse en compromisos, no es una situación donde puede vencer Armenia, Azerbaiyán o Karabaj", explicó.
El líder armenio recordó que el Grupo de Minsk de la OSCE (Rusia, EEUU y Francia) elaboró tres principios para el arreglo del conflicto en Nagorno Karabaj: la prohibición de la fuerza o la amenaza de la fuerza, la integridad territorial de los Estados, la igualdad de derechos y la libre determinación de los pueblos. En ese sentido Sargsián destacó que Ereván está dispuesto a volver a las negociaciones con Bakú, "pero solo en la base de tres estos principios". Añadió que Ereván reconoce la integridad territorial de Azerbaiyán, pero a la vez considera que el derecho de los pueblos a la autodeterminación debe tomarse en consideración con el conflicto de Nagorno Karabaj.
"Reconocemos la integridad territorial de cualquier Estado, Azerbaiyán incluido, pero la autodeterminación de los pueblos en absoluto se contradice con el principio de la integridad territorial, pues esta última se refiere a las relaciones entre Estados, y la autodeterminación, a las entre una capital y un pueblo que vive en forma concentrada", dijo Sargsián. Destacó que está dispuesto a reunirse con el líder de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, si esta reunión resulta productiva. Más: Rusia, Armenia y Azerbaiyán acuerdan expandir misión observadora en Karabaj "Nunca nos negamos a las reuniones, ya sea a nivel del presidente, del canciller o a nivel de trabajo; pero siempre abogamos por que estas reuniones sean útiles, generen avances", declaró el presidente armenio. "Si no hay avances, si nos reunimos pero no se cumplen los acuerdos, ¿qué beneficios brindan estas reuniones?", expresó Sargsián.
Subrayó que Armenia está dispuesta a firmar el acuerdo sobre la creación de un mecanismo para investigar las violaciones de la tregua incluso "mañana o esta tarde". El conflicto en torno a la autoproclamada República de Nagorno Karabaj, que divide a Armenia y Azerbaiyán desde 1988, experimentó a principios de abril una escalada después de haber permanecido latente durante más de dos décadas. Desde el 5 de abril se mantiene un armisticio frágil pero los bandos del conflicto se acusan regularmente de violarlo. Bakú perdió el control sobre Karabaj y siete distritos adyacentes tras una guerra que se prolongó de 1992 a 1994.