Las tecnologías de asistencia a la conducción cada vez están más presentes incluso en los coches de los segmentos más bajos. Están evolucionando hasta el punto de que tendrán un carácter predictivo que permitirá anunciar al conductor qué le espera más adelante. De este modo, el automovilista podrá actuar en consecuencia; si no es capaz de reaccionar, el coche actuará por sí mismo.

En esta dirección está trabajando Continental, que ha presentado los sistemas eHorizon y el PreviewESC. El primero tiene como objetivo analizar las condiciones de la carretera gracias al denominado ‘Road Condiction Observer’ (‘observador del estado de la carretera’), que utiliza elementos disponibles en los vehículos más modernos (cámaras y ESC) para analizar el asfalto y determinar las condiciones de conducción, en función de si está seco, mojado, con nieve, etc.

La información recabada se sube de manera automática a la nube, desde donde otros vehículos pueden descargarla, sabiendo así con anticipación qué es lo que se van a encontrar en su viaje. En la nube el sistema eHorizon se encarga de procesar todos los datos con ayuda de la inteligencia artificial y proporciona información ya no solo de las características estáticas de la carretera (radio de las curvas, desniveles, etc.), sino también de las condiciones existentes en cada momento.

Esto, a su vez, sirve de ayuda para el PreviewESC. Este sistema analiza los datos y los compara con la velocidad del vehículo para calcular si esta es demasiado alta como para afrontar el tramo con seguridad. Si ese es el caso, avisará al conductor para que reduzca la velocidad y, si es necesario, puede incluso ajustarla de manera automática.

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