"La misiva de la Comisión Europea se refiere en concreto a las superaciones de los límites legales de dióxido de nitrógeno, que se concentran especialmente en la ciudad de Madrid y el área metropolitana de Barcelona", informó el Ministerio para la Transición Ecológica de España.
Tras la recepción de esta carta, el Gobierno de España manifestó su "preocupación" por el toque de atención desde Bruselas y trasladó la petición de las autoridades comunitarias a los gobiernos locales de ambas ciudades.
En un comunicado emitido el 9 de julio, el Gobierno de España destacó su voluntad de trabajar con las autoridades locales para cumplir los límites comunitarios en materia de calidad del aire "proteger la salud pública" y además "evitar una posible multa por parte del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE)".
El llamamiento de la Comisión Europea llega en un momento en el que la sociedad española se encuentra inmersa en un debate sobre la necesidad de medidas para cuidar la calidad del aire en las grandes ciudades, sobre todo a raíz de la polémica generada en el Ayuntamiento de Madrid, donde un nuevo alcalde conservador se encuentra desarrollando planes para revertir la zona de bajas emisiones instaurada por el antiguo equipo de gobierno municipal.
La instauración de esa zona de bajas emisiones fue uno de los puntos clave del proyecto presentado por España para evitar multas desde el TJUE después de que la Comisión Europea amenazara con llevar ante los tribunales los continuos incumplimientos de la legislación sobre la calidad del aire en Madrid y Barcelona.
Sputnik
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