Una maestra de inglés fue despedida de la institución donde trabajaba, en la ciudad de Fort Worth (Texas, EE.UU.), luego de que pidiera al presidente Donald Trump liberar a su escuela de inmigrantes indocumentados.
La petición la hizo Georgia Clark, a mediados de mayo, a través de una serie de tuits en los que se lamentaba de que sus aulas estuviesen llenas de "estudiantes ilegales de México". "Cualquier cosa que pueda hacer para sacar a los ilegales de Fort Worth será muy apreciado", reza uno de sus mensajes al mandatario. Clark también incluyó allí sus números telefónicos, para que se le pudiese contactar, y pidió garantías de que su identidad sería protegida cuando se tomaran medidas.
Según The Washington Post, la maestra aseguró luego a la junta educativa del distrito que no sabía que los tuits eran de acceso público. A pesar de sus alegatos, este martes el panel votó unánimemente a favor de rescindir el contrato de Clark, quien a su vez anunció que se propone apelar la medida.
La investigación realizada destapó otras denuncias anteriores sobre el comportamiento de esta maestra. En el 2013, Clark fue suspendida sin goce de sueldo por haberse referido a estudiantes hispanos como 'Little Mexico' ('Mexiquitos') y a los de raza caucásica como 'White bread' ('Pan blanco').
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