El pequeño Griffin Spikoski pasa unas 18 horas al día pegado a la pantalla de su ordenador jugando a Fortnite, el videojuego multijugador que está causando furor y que ya cuenta con más de 200 millones de seguidores en todo el mundo. Sin embargo, Spikoski no es uno más de estos jugadores: su canal de YouTube en el que sube vídeos de sus partidas al juego ‘on-line’ cuenta con más de 1 millón de suscriptores y más de 71 millones de visualizaciones. Unas cifras que le llevaron a ingresar cerca de 200.000 dólares el año pasado, gracias a anunciantes patrocinios.
El niño de tan solo 14 años, conocido como “Sceptic” en YouTube, se ha tomado Fornite como un deporte de élite, según The Washington Post. Cuando no está jugando completa las tareas escolares a través de internet. Pero el foco, según su propia familia, está puesto en los videojuegos. “Esto es como mi trabajo”, explicó Spikoski.
En un corto documental publicado esta semana en YouTube, la madre del pequeño Griffin, Kathleen Connolly, explicó que la pasión y el éxito de su hijo la pillaron por sorpresa. “Nunca me di cuenta de lo bueno que era Griffin en los videojuegos. El me lo dijo y después el mundo me lo confirmó”, apuntó Connolly. Una vez los padres descubrieron el gran potencial del niño, no quisieron desaprovechar la oportunidad y han creado la compañía Sceptic Gaming y han contratado a un asesor financiero y a un contable para ayudar al joven a manejar su dinero.
Los “e-sports” se han convertido en un gran negocio. Tanto que los mayores torneos ofrecen premios de cerca de 25 millones de dólares, según Gamespot. De hecho, el último año, la compañía Epic Games, creadora de Fortnite, anunció que financiaría con 100 millones de dólares las competiciones del famoso videojuego de la siguiente temporada.
La fama llegó a Spikoski cuando el año pasado venció a un conocido jugador Fortnite y subió un video de la batalla a su canal de YouTube. El resultado: 7,5 millones de visitas en pocas horas. No pasó mucho tiempo hasta que el adolescente consiguió sus primeros 100 dólares con Twitch. Los padres de Spikoski afirmaron que decidieron retirar a su hijo del instituto a medida que su dedicación a los juegos se profundizaba. Según la madre, con su creciente notoriedad Griffin luchó por manejar dos mundos, y dos personalidades, que se sentían cada vez más divergentes. En persona, Spikoski es tímido y ansioso. En el mundo virtual, es confiado y travieso.
Lavanguardia