El periodista británico Piers Morgan ha conversado con Bernard Giles, asesino en serie condenado por la muerte de cinco mujeres, y este sábado se ha hecho pública una parte de esta escalofriante entrevista.

Giles, que ahora se encuentra en una prisión de alta seguridad en el estado de Florida (EE.UU.), asesinó a cinco mujeres de entre 14 y 22 años durante unos tres meses a comienzos de la década de 1970. Sus víctimas fueron autoestopistas, que esperaban que el hombre las llevara en su coche, pero en lugar de ello Giles las violaba y luego mataba a tiros.

El hombre, calificado por Morgan como "el peor y el más conocido asesino en serie" estadounidense, admite que cometió todos los asesinatos por los que fue condenado a cinco cadenas perpetuas. De acuerdo con sus afirmaciones, empezó a sentir pasión por la violencia sexual contra las mujeres en su niñez, cuando tenía solo 6 años. "A partir de aquel momento, cualquier cosa que veía o leía que tenía algo que ver con violencia sexual contra las mujeres era un estímulo sexual. En mi infancia, me obsesioné con esto", recuerda, citado por Daily Mail.

"La pasión de mi vida fue matar mujeres"
Cuando el maníaco, entonces sin antecedentes penales, cometió su primer delito a los 19 años, trabajaba como electricista y tenía esposa y una hija de 5 meses. La cantante de un bar, Nancy Gerry, de 18, se convirtió en su primera víctima, a la que Giles llevó a un bosque para luego matar. El periodista presta atención a los sentimientos que Giles experimentó tras el asesinato y el preso confiesa que después se sentía "muy estimulado" y compara su excitación con la sensación como si pudiera ver cómo "vibran los átomos". Al ser preguntado si siente remordimiento, Giles respondió que no.

"La pasión de mi vida fue matar mujeres", admite. En ese contexto, revela que no le importaba la apariencia de sus víctimas y el principal criterio de elección fue el "acceso" a ellas. El criminal detalla que para él "la objetivación de las víctimas […] es un elemento importante" en el asesinato y así explica que "nunca mató a alguien conocido". Cuando Morgan le pregunta a Giles qué pensaría si alguien violase a su hija y la matara, el preso afirma que eso "ciertamente no le gustaría".

Reconoció su culpabilidad
El hombre fue detenido unos 3 meses después del primer delito debido a un intento fallido de asesinato, cuando sus víctimas lograron huir e identificaron a su agresor por un manual de electricista con su nombre escrito, que vieron en el coche de Giles. Al reconocer su culpabilidad de todos los cinco asesinatos, no fue sentenciado a la pena de muerte, pero pasará su vida detrás de las rejas y nunca saldrá libre.

A final de la entrevista, Giles responde a la pregunta de Morgan, quien quiere saber los motivos de los asesinatos de todas estas mujeres: "Si quieres chocolate, quieres chocolate. Puedes no comer chocolate, pero no puedes negar que quieres chocolate".

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