"China diseñó deliberadamente su exportación de recursos y su política comercial en la industria manufacturera con la meta de socavar el liderazgo de Estados Unidos en los sectores críticos", aseguran los autores del informe.
El análisis fue ordenado por el presidente estadounidense, Donald Trump, en 2017, para identificar las vulnerabilidades del sector y elaborar recomendaciones con el fin de fortalecer a las compañías militares del país.
Según las fuentes de la revista, los autores del informe acusan a China de inundar los mercados globales con ciertos materiales que se requieren, por ejemplo, para la producción de combustible de los misiles estadounidenses y piezas para los aviones de combate norteamericanos.
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Esta estrategia de Pekín, afirman los analistas, "obliga a los proveedores estadounidenses a retirarse del negocio".
El estudio precisa que China controla la mayor parte de las exportaciones mundiales de perclorato de amonio, un compuesto químico clave para el combustible de los misiles balísticos intercontinentales, y vende el producto a "precios artificialmente bajos" afectando de este modo al único productor estadounidense del compuesto.
La tensión entre EEUU y China se incrementó en marzo, luego que Trump anunciara aranceles a la importación de acero y aluminio.
Desde entonces, Washington y Pekín impusieron varias medidas de salvaguardia, en una suerte de "ojo por ojo", con negociaciones que hasta el momento no han dado resultados.
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