Los líderes religiosos llegaron primero al Callejón de Mártires en la ciudad de Aghdam. El representante especial adjunto del Presidente de la República de Azerbaiyán en los distritos de Aghdam, Fuzuli y Khojavand, Eldar Seyidov, informó a los invitados sobre el Callejón de Mártres y el vandalismo cometido aquí por los armenios. Informó de que los hijos heroicos de la Madre Patria que murieron en la Primera Guerra de Karabaj, así como los civiles asesinados durante el genocidio de Joyalí están enterrados en el Callejón de Márties de Aghdam. Los vándalos armenios, que destruyeron todo en Aghdam, también desenterraron y destruyeron las tumbas del Callejón de Mártires.

A continuación, los líderes religiosos se desplazaron a la mezquita de Juma, en la ciudad de Aghdam. Fueron informados de la destrucción de monumentos culturales, históricos y religiosos por los armenios, así como de las obras de construcción y restauración llevadas a cabo por el Estado azerbaiyano tras la liberación de Aghdam de la ocupación. Se informó de que en Aghdam, así como en otras regiones ocupadas por ellos, los armenios cometieron actos de vandalismo sin precedentes contra el patrimonio histórico y cultural de Azerbaiyán. Monumentos, centros culturales, mezquitas y cementerios de la zona fueron destruidos y profanados. Uno de los monumentos histórico-religiosos objeto del vandalismo armenio es la mezquita Juma de la ciudad de Aghdam. La mezquita Juma de Aghdam fue construida en 1868-1870 según el proyecto del arquitecto Kerbalayi Safikhan Karabaghi. Esta mezquita, incluida en la lista de monumentos de importancia nacional, se construyó en el estilo de la escuela de arquitectura de Karabaj. Los armenios no destruyeron la mezquita con fines militares, sino que utilizaron sus minaretes para coordinar acciones. Los minaretes de la mezquita fueron desmantelados desde el interior, el techo fue demolido en varios lugares y los dibujos e inscripciones fueron deliberadamente inutilizados e irreconocibles. Los vándalos armenios demostraron su odio hacia los azerbaiyanos y el mundo musulmán manteniendo ganado en la mezquita de Aghdam Juma. Tras la liberación de Aghdam, la mezquita Juma fue restaurada y recuperó su aspecto anterior.

Figuras religiosas musulmanas realizaron la oración musulmán (namaz) en la mezquita.

El presidente de la Administración Musulmana del Cáucaso, jeque ul-Islam Allahshukur Pashazada, informó a la delegación sobre la mezquita de Aghdam Juma, los crímenes de guerra cometidos por los armenios y su vandalismo contra los monumentos culturales, históricos y religiosos.

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