El artículo afirma que la celebración en Azerbaiyán de la 29ª sesión de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29) es importante, ya que por primera vez en nuestra región se celebrará un evento de tanta autoridad relacionado con el cambio climático. Si bien algunos ven la COP como una plataforma para el debate más que para la acción, Azerbaiyán está decidido a lograr mecanismos prácticos de financiamiento climático y abordar cuestiones relacionadas con los mercados de carbono, los pequeños estados insulares y el futuro de la humanidad en su conjunto. Una de las iniciativas presentadas por Azerbaiyán en el marco de la COP29 es una iniciativa de paz global, como en los Juegos Olímpicos. Este desafío global también refleja las realidades actuales de la región. Así, como resultado de las negociaciones constructivas mantenidas entre Azerbaiyán y Armenia después de un conflicto de 30 años, se delegó en Bakú el derecho de organizar la COP29.

Cabe señalar que tanto Azerbaiyán como Armenia reconocieron que están más cerca que nunca de la paz. La demarcación de una determinada sección de la frontera entre dos países es en realidad un presagio de paz. Todo esto fue posible gracias al hecho de que Azerbaiyán, de conformidad con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, restableció su integridad territorial dentro de las fronteras internacionalmente reconocidas. A quienes critican a Bakú se les debe recordar que fue Armenia quien mantuvo las tierras azerbaiyanas bajo ocupación durante treinta años y llevó a cabo una limpieza étnica contra los azerbaiyanos, y este hecho fue confirmado en documentos internacionales. Aunque los medios de comunicación crearon artificialmente un revuelo en torno a la declaración del Ministro de Asuntos Exteriores británico, David Lammy, sobre la desocupación de los territorios azerbaiyanos, la liberación de las tierras de Azerbaiyán de la dominación extranjera es una realidad. Quienes critican a David Lammy por afirmar este hecho simple y verdadero claramente tienen otros intereses en mente.

El embajador enfatizó que, a pesar de las profundas heridas de treinta años de ocupación, desplazamientos forzados y guerra, fue la parte azerbaiyana, de acuerdo con los principios del derecho internacional, la que extendió la mano de la paz a Armenia. Sin embargo, a pesar de los notables avances en la dirección pacífica, retrasar las negociaciones en el camino hacia el logro de la paz es una estrategia constante de la parte armenia. Aunque Armenia declaró oficialmente su independencia, nunca pudo alcanzar la soberanía total. Armenia, que ocupaba las tierras de un país vecino, estaba condenada a la dependencia económica y militar del exterior. Con la liberación de sus tierras de la ocupación de Azerbaiyán, Armenia tuvo la oportunidad de independizarse, lo que el Primer Ministro Nikol Pashinyan reconoció en sus numerosos discursos. En esta nueva realidad, Armenia necesita corregir sus errores del pasado y cooperar con los países de la región.

“La parte armenia destaca la importancia que para ellos tienen las palabras. Pero se olvidan: ¿qué podría ser más elevado que la palabra reflejada en la Constitución, el máximo acto legislativo del país? La Constitución armenia refleja reivindicaciones territoriales contra Azerbaiyán. Por un lado, los funcionarios armenios declaran el reconocimiento de la integridad territorial de Azerbaiyán; por otro lado, esta declaración contradice la Constitución del país. Algunos pueden decir que esta cuestión se abordará en una cláusula de acuerdo de paz, pero como dice el propio gobierno armenio, ningún acuerdo con un país extranjero prevalece sobre la Constitución.

Como claro ejemplo, el Protocolo de Zurich, firmado entre Armenia y Türkiye y apoyado por países occidentales, fue posteriormente rechazado por el Tribunal Constitucional de Armenia. Por lo tanto, sería más eficaz si la parte armenia, en lugar de actuar ante el público extranjero, se centrara en eliminar los obstáculos reales a una paz duradera y sostenible”, subraya el artículo del diplomático azerbaiyano.

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