AzVision.az informa que así lo afirma el secretario de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores, Aykhan Hajizade, refiriéndose a la declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia del 19 de junio.

Se señaló que durante 30 años fue Armenia quien violó flagrantemente las normas y principios del derecho internacional, violó la Declaración de Alma-Ata, a la que hoy hace referencia repetidamente, cometió agresiones contra la integridad territorial y la soberanía de Azerbaiyán, continuó su política territorial y reclamaciones contra sus vecinos y llevó a cabo sus acciones agresivas. Como resultado de las medidas adoptadas, la creación de la imagen de Armenia como un país pacífico es una manipulación política.

"Sería mejor si la parte armenia, que se refiere a la integridad territorial basándose en las fronteras de 1991 y la Declaración de Alma-Ata, no cumpliera con estos acuerdos en los últimos 30 años, se negara a aceptar las fronteras reflejadas en los mapas soviéticos. Es absurdo que Armenia, que no reconoce fronteras, presente las posiciones ocupadas por los soldados azerbaiyanos después de 30 años como territorios de sus aldeas sin delimitación y acuse a Azerbaiyán de ocupación.

Está claro que países como Francia, que supuestamente apoyan la paz y compiten por suministrar a Armenia armas ofensivas letales, contrariamente a las declaraciones de Armenia encaminadas a aumentar sus capacidades de defensa, sirven para convertir a Armenia en una nueva fuente de tensiones y amenazas. Teniendo en cuenta que esta política contribuye a la próxima posible agresión de Armenia, es importante abstenerse de tomar estas medidas antes de que sea demasiado tarde. La principal condición para la firma de un acuerdo de paz real y duradero entre Azerbaiyán y Armenia es la Constitución armenia, que se refiere claramente al Acta de Independencia de Armenia, que exige la "unificación de Armenia y Nagorno-Karabaj" y el fin de las actuales reivindicaciones territoriales contra Azerbaiyán, que están establecidas en numerosos documentos jurídicos y políticos de este país", subraya el comunicado.

A. Hajizadeh añadió que la lógica del Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia de que se puede ignorar este problema demuestra que este país no está interesado en una paz sostenible y sólo intenta mantener esta situación como una opción de respaldo para iniciar de nuevo la agresión contra Azerbaiyán en el futuro: "Teniendo en cuenta lo anterior, este país no tiene ninguna razón moral para dudar de la sinceridad de la parte azerbaiyana en el proceso de paz. Declaramos una vez más que la política insidiosa de Armenia encaminada a crear nuevas tensiones en la región y obstaculizar la paz y la estabilidad no traerá ningún resultado. La parte armenia es así en lugar de pensamientos llenos de provocaciones y manipulación política contra Azerbaiyán, debe cumplir con las obligaciones internacionales no con palabras sino con hechos y contribuir al proceso de paz".

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