Los invitados recibieron información sobre la mezquita.

En el transcurso de los años de ocupación de las tierras azerbaiyanas por parte de Armenia, los monumentos nacionales históricos, religiosos y culturales del distrito de Zangilan fueron objeto de vandalismo armenio, destruidos y profanados, y la mezquita de la ciudad de Zangilan fue utilizada como establo para el ganado durante la ocupación. Tras la liberación de nuestros territorios de la ocupación, comenzaron las obras de construcción y restauración de la mezquita de Zangilan en el marco de los proyectos de restauración de monumentos históricos, religiosos y culturales de Karabaj.

El Grupo de Trabajo creado por la Fundación Heydar Aliyev e integrado por expertos locales y extranjeros evaluó el estado de la mezquita, a partir de lo cual se tomó la decisión de conservar el edificio. Se construyó una nueva mezquita junto a la mezquita histórica conservada. Por su diseño, el edificio de la mezquita es rectangular, con dos minaretes y tres naves. Tiene salas de oración para 220 y 100 personas. Los minaretes y la cúpula de la mezquita son de ladrillo y están revestidos de azulejos. El interior está decorado con inscripciones caligráficas; el mihrab, con adornos vegetales de azulejos. Los elementos del minbar y el shebeke (mosaicos de colores) son de madera natural.

En el territorio de la histórica mezquita de la ciudad de Zangilan, destruida durante la ocupación, se ha creado una exposición al aire libre que refleja el panorama general del vandalismo cometido contra varios monumentos religiosos en el territorio de Karabaj y Zangazur Oriental. Como una de las consecuencias más graves de la ocupación, la exposición presenta la destrucción deliberada del patrimonio cultural azerbaiyano de importancia universal, incluidos los monumentos pertenecientes a la religión islámica.

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