Cinco inventos que no te imaginabas que eran rusos

  02 Diciembre 2016    Leído: 778
Cinco inventos que no te imaginabas que eran rusos
En tu día a día, seguramente te encuentres con ejemplos del ingenio ruso aplicados a la vida cotidiana.
¡Descubre cuáles son! Empieza tu día, suena la alarma. Tienes que prepararle el biberón a tu bebé. Aquí está el primer invento ruso del día: la leche en polvo.

Aunque tradicionalmente algunos pueblos desecaban leche al sol, fue un científico ruso llamado Osip Krichevski el que sentó en 1802 las bases para deshidratar el producto de manera industrial y obtener un polvo amarillento que conservaba las mismas propiedades. Con el tiempo, se volvió un importante alimento en zonas sin refrigeración y otros científicos perfeccionaron su valor nutricional.

Ya le diste el biberón a tu hijo y desayunaste. Ahora vas al supermercado a comprar una botella de aceite de girasol. ¡Felicitaciones! Has encontrado el segundo invento. Aunque el girasol es una cosecha originaria de América del Norte, fue en Rusia que comenzó a cultivarse masivamente para su procesamiento industrial. En este país se popularizó el aceite para el consumo humano. Un especialista ruso, Vasili Stepánovich Pustovoit, perfeccionó nuevas variedades de esta semilla para aumentar su rendimiento y brindar un mejor producto.

Llegó el momento de pagar. ¿Cuánto cuesta? 79 centavos. Agradece a los rusos por simplificar la moneda. El zar Pedro el Grande en 1704 estableció un sistema para dividir al rublo en 100 kopeks —centavos— y con eso la moneda rusa fue la primera en convertirse en decimal. El resto de países europeos siguió teniendo por mucho tiempo más un complejo sistema de equivalencias para sus monedas. El último en cambiarla fue el Reino Unido, que dejó en 1971 de dividir la libra en 20 chelines o en 240 peniques para seguir el ejemplo que Rusia dio más de dos siglos antes. Vuelves a casa y hace frío. Es hora de prender el radiador. ¡Ya vamos por el cuarto invento ruso del día! Franz Karlovich San Galli, un ruso nacido en Prusia que desarrolló su carrera en San Petersburgo y patentó en 1855 lo que llamó la "caja caliente" a partir de un sistema de agua y vapor. Su invento fue la base de los radiadores modernos.

Ya estás cómodo y abrigado. ¿Qué tal si prendes la televisión para informarte de las noticias? Sabemos que esto puede sonar extraño, pero vamos por el quinto invento ruso del día: el televisor. El tubo catódico, el elemento fundamental de los receptores hasta el advenimiento de las pantallas delgadas, fue inventado por Vladímir Kozmich Zvorykin, nacido y educado en Rusia, pero que llevó adelante su vida profesional en Estados Unidos. También su profesor y coterráneo Boris Lvovich Rosing había investigado métodos para lograr un modo de transmitir imágenes remotas en una pantalla. En el recorrido que te propusimos, de apenas un par de horas, encontramos cinco creaciones rusas. ¡Si continuáramos un día más seguramente encontraríamos muchas más!

Sputnik

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