La bomba atómica se considera el arma más devastadora del mundo. Las consecuencias de su explosión son una combinación de llamas ardientes, una onda de choque explosiva y radiación mortal. Los edificios se desplomarán a una distancia de hasta dos kilómetros del epicentro debido a la enorme velocidad de propagación de la onda de choque. ¿Qué hacer? Si sucede una explosión atómica y está en la calle, apártese hacia lado opuesto, túmbese en el suelo y espere hasta que la onda de choque se aleje. Después, busque refugio en un edificio resistente, cierre todas las ventanas y rejillas de ventilación. Lo mejor es bajar al sótano con las paredes gruesas hechas de ladrillo u hormigón. Permanezca allí por al menos nueve días sin salir. Supervolcán El supervolcán es un volcán que durante la erupción expulsa más de mil kilómetros cúbicos de ceniza y lava. Los gases tóxicos van envenenando todo lo vivo en el planeta. ¿Qué pasará?
Antes de que la ceniza de la lava caiga al suelo, millones de toneladas de sus partículas y los gases tóxicos formarán una enorme nube. El aire se llenará con una mezcla sofocante, parecida al cemento, capaz de obstruir los pulmones. ¿Qué hacer? Si se encuentra cercano a una erupción, trate de irse de esta zona lo más pronto posible —la ceniza mortal es capaz de extenderse a una velocidad de entre 16 y 72 kilómetros por hora-.
Además, intente conseguir una máscara antigás que filtrará partículas nocivas y protegerá sus ojos y piel. Pandemia 200 millones de personas están sangrando y muriendo. ¿Qué pasará? Por culpa de los rápidos medios de transporte, las enfermedades se propagan por la Tierra a una velocidad increíble. Las pandemias son enfermedades epidémicas que se propaga fuera de sus límites controlables. Según creen los científicos, la próxima pandemia será una epidemia de gripe, un virus que se hace aún más peligroso cuando una persona recibe cepas de animales, tales como aves o cerdos.
Cuando la gripe aviar y la gripe humana atacan la misma célula al mismo tiempo, generan un nuevo virus que combina las propiedades más peligrosas de las dos enfermedades originales. ¿Qué hacer? Si a una distancia cercana estalla un brote de un virus asesino, siempre cubra la boca con un pañuelo desechable o la manga de su ropa y no con la mano al estornudar o toser. Además, debe lavarse las manos con frecuencia con agua tibia y jabón. Nunca se le dé a nadie sus artículos personales tales como toallas, ropa de cama o cepillo de dientes. Siempre desinfecte todas las superficies en su casa y no se olvide de lavar el baño. Evite contacto cercano con la gente infectada.
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