El Gobierno libio estará abierto a negociaciones con el comandante golpista Jalifa Haftar, en el este del país, después de liberar la ciudad costera de Sirte y la región central de Juffra, hogar de una base aérea militar estratégica, según el ministro del Interior del país, Fathi Bashagha.

Sirte tiene un valor simbólico para el Gobierno legítimo de Libia porque sus fuerzas desempeñaron un papel activo en la operación dirigida por Estados Unidos que retomó la ciudad del grupo terrorista Daesh/ISIS en 2016, explicó Bashagha al medio Bloomberg en una entrevista publicada el domingo.

Bashagha subrayó que la operación contra Daesh/ISIS les costó "más de 718 jóvenes muertos".

"No permitiremos que Sirte esté bajo ninguna autoridad excepto la autoridad legítima del Gobierno de Acuerdo Nacional", resaltó Bloomberg citando a Bashagha, utilizando otro nombre para el Gobierno libio.

"Necesitamos evitar que Rusia establezca bases en Sirte y Juffra", agregó.

El sábado, el presidente de Egipto, Abdel-Fattah al-Sisi, acordó una iniciativa política con Aquila Saleh, el presidente del Parlamento libio de Tobruk y caudillo de Jalifa Haftar.

La Declaración de El Cairo pidió un alto el fuego en Libia a partir del lunes y propuso una nueva asamblea para formar la Cámara de Representantes y el Consejo Presidencial.

Ni los miembros del Gobierno libio ni sus aliados internacionales estuvieron presentes en la conferencia en El Cairo.

Solo Rusia mostró apoyo a la declaración.

El Ejército libio ha logrado importantes avances militares contra las milicias de Haftar en los últimos días, capturando la ciudad de Wadi Wishka y otras dos áreas al sur de Sirte.

El Ejército lanzó el sábado una operación militar, Camino de Victoria, para capturar de las fuerzas de Haftar a Sirte, Jufra y las ciudades de Wadi Wishka, Buerat, Jarif y Qasr Abu Haid.

Las fuerzas de seguridad libias liberaron el área de Wadi Wishka a las afueras de Sirte.

La medida se produjo un día después de la liberación de la ciudad estratégica de Tarhuna, considerada como la última fortaleza de Haftar en el oeste de Libia.

El Gobierno de Libia ha sido atacado por las fuerzas de Haftar desde abril de 2019, lo que ha provocado la muerte de más de 1.000 personas.

Libia ha sido devastada por la guerra civil desde el derrocamiento de Muammar Gaddafi en 2011.

El Gobierno de Libia fue fundado en 2015 bajo un acuerdo liderado por la ONU, pero los esfuerzos para un acuerdo político a largo plazo fracasaron debido a la ofensiva militar de las fuerzas de Haftar.

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