"El ataque, que enredó durante días el tráfico alrededor del puerto, fue llevado a cabo por agentes israelíes, supuestamente en represalia por un intento anterior de penetrar en las computadoras que operan sistemas de distribución de agua rural en Israel, según funcionarios de inteligencia y ciberseguridad familiarizados con el asunto", escribe el periódico.
Un funcionario de seguridad de un Gobierno extranjero calificó el ataque de "muy preciso" y opinó que el daño fue superior al que reconocieron las autoridades iraníes.
"Hubo un desorden total", dijo esta fuente, que insistió en no revelar su nombre ni nacionalidad.
Un funcionario estadounidense con acceso a archivos clasificados también dijo que los israelíes habrían estado detrás del ataque.
Según las imágenes satelitales que fueron enseñadas al periódico, hubo atascos kilométricos el 9 de mayo en las carreteras que conducen a la terminal portuaria Shahid Rajaee en Bandar Abás y decenas de portacontenedores esperando el 12 de mayo cerca de la costa.
La embajada israelí en EEUU no respondió a la solicitud de comentarios, según The Washington Post. Portavoces de las Fuerzas de Defensa de Israel rehusaron pronunciarse sobre el incidente.
El director gerente de la Organización Marítima y Portuaria de Irán, Mohammad Rastad, confirmó el 10 de mayo que un ciberataque reciente pudo "dañar una serie de sistemas operativos privados en los puertos".
Fuentes de inteligencia extranjeras citadas por The Washington Post el 8 de mayo apuntaron que Irán estaría vinculado al fallido ciberataque del pasado 24 de abril contra al menos dos redes rurales de distribución de agua en Israel.
En septiembre pasado, el canciller iraní Mohamad Yavad Zarif afirmó que Irán se enfrenta a una ciberguerra. El ministro mencionó la llamada Operación Juegos Olímpicos, que EEUU e Israel habrían lanzado en 2006 contra el programa nuclear iraní, y los actos de sabotaje realizados con el gusano informático Stuxnet.
Identificado en 2010, Stuxnet es un código malicioso que ataca ordenadores del sistema operativo Windows a través de vulnerabilidades de día cero. Se habría utilizado en 2009 y 2010 para infectar ordenadores en varias entidades iraníes, entre ellas la planta nuclear iraní de Bushehr, y fue detectado desde entonces en otros países como Indonesia, la India, Azerbaiyán, Pakistán y EEUU.
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