"Estados Unidos no tiene ningún derecho al veto sobre las acciones del Fondo Monetario Internacional", manifestó Rabiei durante una rueda de prensa.
El portavoz expresó la esperanza de que los demás miembros del FMI se opongan a "una actuación inhumana" y enfatizó que los organismos internacionales no son propiedad exclusiva de Washington.
El presidente de Irán, Hasán Rohaní, exhortó el 8 de abril al FMI a otorgarle a su país 5.000 millones de dólares para hacer frente a la crisis de COVID-19. A mediados de marzo las autoridades iraníes habían presentado una solicitud similar sin que el FMI les proporcionara la suma requerida hasta hoy [13 de abril].
El 7 de abril, The Wall Street Journal publicó que EEUU planea bloquear el préstamo de emergencia. Altos cargos del Gobierno de Donald Trump alegan que Teherán todavía dispone de miles de millones de dólares en sus cuentas y podría desviar el crédito del FMI para ayudar a su economía frente a las sanciones estadounidense, o bien para financiar a las milicias de Oriente Medio en vez de combatir la epidemia.
Hoy en día, Irán es la octava nación del mundo más afectada por la pandemia de COVID-19, con más de 73.300 casos de contagio confirmados hasta ahora, entre ellos 4.585 decesos.
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