Alrededor de trescientos huesos humanos fueron recuperados el pasado viernes del estanque de una casa situada las afueras de Bangkok, cuyo dueño está acusado de asesinar a su novia y ocultar su cadáver.

Apichai Ongwisit, de 40 años, fue arrestado este mes después de que el cuerpo de Warinthorn Chaiyachet, de 22 años, fuera descubierto enterrado en su propiedad, envuelto en ropa, una sábana y una bolsa de plástico. Según medios locales, el hombre ha admitido haber matado a la joven. El sospechoso, supuestamente adicto a las drogas, se puso una noche tan celoso que ordenó a su pareja que durmiera en un gran recipiente de metal para que no lo dejara. Según su testimonio, cuando abrió el contenedor a la mañana siguiente descubrió que la mujer se había asfixiado.

Después de arrestarlo, la Policía recibió un aviso de que podría haber más víctimas enterradas en su propiedad. Como parte de la investigación, los agentes ordenaron el registro del estanque cerca de la casa de Ongwisit, a las afueras de Bangkok, donde los buzos finalmente encontraron al menos 298 huesos humanos.

El coronel de Policía Jirakrit Jarunpat aclaró que los huesos recuperados están siendo examinados por expertos forenses, y que todavía se desconoce a cuántos cuerpos pertenecen. Asimismo, la investigación ha encontrado que varias mujeres que estuvieron relacionadas con el sospechoso —amigas, novias y prostitutas— se hallan en paradero desaparecido, detalló Jarunpat.

El padre de Ongwisit, Chalermchai Onkvisit, fue encarcelado en 1983 por matar a una adolescente de 15 años y desmembrar su cuerpo.

RT

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