En Australia han hospitalizado a tres pasajeros del vuelo doméstico australiano TT644 de la compañía Tigerair Australia, que salió este jueves de la ciudad de Adelaida rumbo a Sídney. La nave se vio obligada a desviarse tras detectarse un "olor inusual" a bordo, informa el medio local Nine News.
Los pilotos realizaron con éxito un aterrizaje no programado en el Aeropuerto Internacional Tullamarine en la ciudad de Melbourne.
Los paramédicos que acudieron al lugar atendieron a seis pasajeros con "problemas de oído". Tres hombres fueron trasladados a un hospital. No queda claro qué tipo de quejas presentaron los afectados, aunque se especifica que su estado es estable. Todos los pasajeros fueron reprogramados para otros vuelos.
Un portavoz de la aerolínea destacó que la decisión de desviar el vuelo se tomó "como medida de precaución". La inspección posterior reveló un problema mecánico en una "pequeña unidad de potencia a bordo", aunque el sistema del propio avión no fue dañado, por lo que la mañana del viernes la nave ya estaba autorizada para volver a operar, agregó el vocero.
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