"La Fuerza Aérea se permite informar a la opinión pública que, en horas de la mañana, después de ubicar el lugar del accidente de la aeronave, fueron hallados los tripulantes, evidenciando que no hay sobrevivientes", indicó la FAC en un comunicado.

Asimismo, indicó que "a partir del momento se procederá a la evacuación de la tripulación por parte del equipo de rescate a cargo de la operación".

Anteriormente, la FAC había anunciado el hallazgo del helicóptero, el cual era buscado desde el viernes 25.

"A las 6.05 horas (11.05 GMT), aprovechando las condiciones atmosféricas favorables en la zona, en una operación aérea, se logró confirmar el hallazgo del helicóptero siniestrado e insertar personal de rescatistas de la Fuerza Aérea, quienes realizan labores de búsqueda de los tripulantes", señaló la FAC.

Los restos del helicóptero fueron hallados en el cerro Monasterio, vereda (aldea) La Victoria, municipio de Albán (Cundinamarca), cerca de Bogotá, precisó la FAC.

La aeronave era comandada por el teniente coronel Mario Efrén Gómez Parra y por el mayor José Enrique Alzate Girado, quienes viajaban junto con el técnico jefe Nelson Enrique Bautista Escobar y por los técnicos segundos Juan Pablo Castellanos Casallas y David Rodrigo Mejía Sánchez, así como también por el técnico cuarto David Alejandro López Cáceres.

Tras expresar su solidaridad con los familiares de las víctimas, el presidente de Colombia, Iván Duque, pidió la colaboración internacional para investigar el caso.

"Pido a la Fuerza Aérea que tengamos todos los protocolos de investigación y que pidamos toda la colaboración internacional que se requiera para establecer las causas de este accidente", dijo Duque, según declaraciones difundidas por la Presidencia de Colombia.
El helicóptero siniestrado, que según la FAC estaba en óptimas condiciones y recién había pasado por mantenimiento, fue adquirido en 2012 para servir a la Presidencia de la República e incluso fue usado para que el papa Francisco hiciera un sobrevuelo por Cartagena (norte) en su visita en septiembre de 2017.

Los controladores perdieron contacto con la aeronave el viernes 25 de octubre a las 14.16 hora local (19.16 GMT), luego de que había partido de la Base Aérea Palanquero (Cundinamarca) para aterrizar en el vecino Comando Aéreo de Mantenimiento, por lo cual se activaron los protocolos de búsqueda.

El lugar del siniestro presenta de manera habitual condiciones climáticas adversas por los fuertes vientos y es de difícil acceso por su topografía, ya que se ubica a unos 2.800 metros de altura.

Además, es un área aérea congestionada por las radioayudas de aproximación al aeropuerto Eldorado, de Bogotá.

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