A Mariano Rajoy le salió este sábado un aliado inesperado. Un actor que nunca ha escondido su condición de votante socialista. Hablamos de Antonio Banderas, quien en los prolegómenos de la gala benéfica Starlite patrocinada por Ford en Marbella aseguró que el PSOE debería facilitar el Gobierno del PP. "El pueblo español dio un ganador en las primeras elecciones.

Hubo una serie de negociaciones que no llegaron a buen término y se llamó a los españoles a votar otra vez y volvió a ganar el mismo con 14 diputados más. Eso alguien debe de saber leerlo. No creo que por abstenerse pase nada porque eso no quiere decir que se apoye a Rajoy.

Es un momento muy importante en el que se tienen que aprobar presupuestos y si hay terceras elecciones alguno se va a dar un talegazo importantísimo", expresó el actor malagueño refiriéndose al líder socialista Pedro Sánchez, alineándose así con el discurso de Felipe González.

Pero es que su capote a Rajoy fue más allá al quitarle hierro a los escándalos de corrupción que han hecho tambalear los cimientos de Génova 13. "La corrupción está en todos lados. No sólo en los políticos. Está en la condición humana", comentó.

El intérprete, que sigue muy de cerca la actualidad política española, se mostró "preocupado" por la situación enquistada de las negociaciones de Gobierno. Y también quiso mojarse en lo referido a la carrera presidencial norteamericana. Banderas mostró su apoyo a la candidata demócrata Hillary Clinton y mostró su rechazo al líder republicano Donald Trump.

"No se puede generalizar y atacar a la comunidad latina como lo está haciendo. Olvidándose que esta comunidad juega un papel muy importante en los Estados Unidos y que muchos llegaron en circunstancias muy difíciles y ahora son grandes médicos, arquitectos o estrellas de Hollywood. Una persona que no sea mesurada no puede ser presidente de un país como los Estados Unidos", subrayó el director de Locos en Alabama, que no entiende el apoyo de Clint Eastwood a la candidatura de Trump.

El actor, que concedió su rueda de prensa en el oasis marbellí de La Cabane, apareció con el rostro relajado. Disfruta cada minuto que pasa en Málaga y está atravesando por un momento dulce tanto en el plano profesional como en el sentimental.

El actor está encantado con su novia holandesa, la empresaria Nicole Kimpel, quien le acompañó en la gala celebrada en la noche de ayer y cuyos fondos se destinarán a importantes obras sociales principalmente en Latinoamérica gestionadas por la fundación del actor Lágrimas y Favores y por la fundación Niños en alegría de la artífice del Starlite, Sandra García Sanjuán.

Banderas pidió a los periodistas que no confundiesen a su pareja con su hermana gemela durante la gala. "Cuidadito, que son iguales", bromeó el artista que sí quiso dejar claro que no tiene pensado casarse con su novia. "Las bodas son muy caras", ironizó al tiempo que desmintió que su relación con su ex mujer Melanie Griffith fuese mala. "Nos llevamos bien. Hablamos a menudo y compartimos las casas que tenemos.

Al final cuando dejas una relación de 20 años siempre se sufre, te quedas con una cierta sensación de fracaso, pero cuando miro a mi hija me doy cuenta que no lo fue", se sinceró el malagueño, que reconoció que tras su separación apalabró con Griffith un pacto de no agresión. Lo cierto es que a Banderas parece que le ha sentado bien alejarse de ella. El malagueño está delgado, luce un look juvenil y ha disfrutado estos días de la conducción de un flamante Ford Mustag V8 para el que hay una lista en espera en España de 6 meses. "No os imagináis lo encantado que estoy con el coche", dijo.

El intérprete parece que no va a tener vacaciones. Acaba de volver de Chile de rodar una película y tiene pensado seguir centrado en sus estudios de moda en la célebre escuela Central Saint Martins de Londres donde vive con su pareja y su suegra. De allí no tiene previsto regresar a Málaga, ciudad donde tiene encima de la mesa un proyecto para volver a las tablas, una de sus grandes pasiones.

El cine también seguirá centrando su atención y su idea es producir y dirigir sus propias películas "sin depender de la contaminación del dinero de nadie". Uno de sus proyectos más ansiados será producir la película sobre Pablo Picasso de Carlos Saura, aunque una serie de problemas con los derechos del guión tiene "secuestrado" el proyecto.

Etiquetas: