El titular destacó en una rueda de prensa en Moscú que alrededor de los migrantes se creó un negocio extraño, "el negocio de las mafias de dos continentes".

"La solución no consiste en que todos los países de Europa compartan la responsabilidad, hay que bloquear la migración en sus orígenes, en Túnez, bloquear las playas", advirtió el ministro italiano.

Salvini aseguró que no teme ganar enemigos con su política respecto a los migrantes irregulares.

"Si temiera, no estaría aquí, no hubiera venido a Rusia", destacó el titular, que sostuvo en Moscú un encuentro con su homólogo ruso, Vladímir Kolokóltsev, con quien debatió los problemas migratorios y la lucha antiterrorista.

Previamente Salvini anunció que Italia cierra sus puertos temporalmente a los barcos de las ONG que rescatan a migrantes en el Mediterráneo.

En los últimos meses, Italia negó el acceso a los puertos nacionales a varios buques con migrantes, en particular al barco Lifeline, con más de 230 personas a bordo, que llegó a las costas maltesas hace dos semanas, mientras España aceptó recibir al Aquarius, con 629 personas, que desembarcó en Valencia en junio.

Sputnik

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