"De acuerdo con el plan del Gobierno sirio, durante un mes en todas las localidades de Guta Oriental deberán restablecerse suministros de luz y agua para que los habitantes tengan al menos las condiciones básicas de vida", dijo el gobernador.
La vida pacífica se restablece, prosiguió, los refugiados vuelvan a sus hogares, en los últimos días unas 700 personas regresaron a sus casas en las afueras de Damasco desde el Líbano.
Sin embargo, según el gobernador, la mayoría de los civiles se quedaron sin techo, por lo cual fueron trasladados a un campamento temporal, la construcción de viviendas está en curso.
El número de habitantes en la provincia creció de 2,8 millones a 5 millones por el flujo de refugiados.
El gobernador subrayó que de momento lo importante es restablecer el servicio médico y, puesto que se acerca el inicio del año escolar, se hace todo lo posible para restaurar más colegios.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas.
Según datos de altos cargos de la ONU, unas 400.000 personas perdieron la vida en el conflicto.
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