Convocados por las asociaciones civiles separatistas Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, miles de personas participaron el viernes en el acto de protesta, portando las banderas nacionalistas catalanas.
A la concentración también, acudió el presidente catalán, Quim Torra, quien en un breve discurso ante la multitud dijo que esperaba unas palabras de disculpa del rey de España después del referéndum independentista en Cataluña del 1 de octubre de 2017.
Reafirmó su compromiso de que de ahora en adelante “ningún miembro del Govern asistirá a ningún acto que convoque el monarca español”, mientras que la Generalitat “no invitará al monarca español a ningún acto que organice el Gobierno de Cataluña”.
Torra además, lamentó que en España ya “no hay justicia”, sino una “situación de anormalidad y excepcionalidad política”: “Si normalizamos un día lo que está pasando en Cataluña, el olvido caerá encima de nosotros y nos devorará”, afirmó.
El presidente independentista catalán luego acudió al Nou Estadi, a donde llegó Felipe VI para presidir la ceremonia inaugural de los Juegos Mediterráneos, prevista para las 21.00 (hora local). El monarca fue recibido allí por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, pero no por Torra, quien solo llegó para saludar al rey.
En el estadio, Torra entregó a Felipe VI un libro de fotos sobre la jornada del 1-O, en la que los votantes al plebiscito independentista se enfrentaron a las cargas policiales.
El referéndum del 1 de octubre, suspendido por el Tribunal Constitucional español, pero finalmente celebrado, se saldó con un rotundísimo triunfo (90,18 %) del ‘sí’ a la secesión, pero en los días siguientes, ante las amenazas de las autoridades centrales, los independentistas se contentaron con una ambigua declaración independentista, aun así suspendida.
HispanTV.es
Etiquetas: