"Los grupos radicales de Idlib son una amenaza tanto para Turquía como para Siria, pero es incorrecto bombardear todo Idlib bajo este pretexto (….) espero que no ocurra este ataque y si tiene lugar, no habrá sentido en el proceso de Astaná", dijo Cavusoglu a la cadena NTV.
El canciller turco declaró que en reiteradas ocasiones ha expresado esta idea ante Rusia y EEUU.
"Al régimen sirio, después de la operación en Guta Oriental, le interesa más una solución militar, por lo que Rusia e Irán, como garantes del régimen, deben hacer lo que están obligados a hacer", agregó.
Asimismo, reconoció que los grupos radicales penetran en Idlib, a pesar de los esfuerzos de Turquía de garantizar la seguridad en la zona.
Siria, que vive un conflicto armado desde 2011, cuenta con cuatro zonas de distensión que abarcan el suburbio de Damasco Guta Oriental, determinadas partes en el norte de la provincia de Homs, la provincia de Idlib y varias partes de las provincias vecinas (Latakia, Hama y Alepo), así como determinados distritos ubicados en el sur de Siria.
Esas zonas fueron creadas tras varias rondas de negociaciones en Astaná, patrocinadas por Rusia, Turquía e Irán, que actúan como garantes de paz.