Corea del Norte y Corea del Sur regresan al camino de un mejoramiento de sus relaciones bilaterales. Los dos vecinos realizaron una nueva ronda de conversaciones de alto nivel en un momento de intensa actividad diplomática previa a la cumbre entre el líder norcoreano, Kim Jong-un, y el presidente estadunidense, Donald Trump.
Este encuentro estaba programado para el mes pasado, pero fue suspendido por Pyongyang en respuesta a un ejercicio militar conjunto entre Washington y Seúl.
Ambas partes abordaron las diferentes formas de implantar el acuerdo alcanzado durante la cumbre del líder norcoreano y el presidente surcoreano, Moon Jae-in, a finales de abril.
También se analizó la creación de una oficina de asuntos conjuntos en la localidad fronteriza de Kaesong, ubicado en Corea del Norte, y que las dos Coreas celebren este mes de forma conjunta el aniversario de la histórica cumbre intercoreana del año 2000.
La reunión intercoreana se produce en un momento de intensa actividad diplomática previa a la cumbre entre Kim y Trump.
En la misma línea, el vicepresidente del Partido del Trabajo de Corea del Norte se reunió en Nueva York con el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, y así seguir con los preparativos para la cumbre prevista para el 12 de junio en Singapur.
El jueves, el líder norcoreano en una señal de buena fe, enfatizó que la voluntad de Pyongyang para la desnuclearización de la península coreana sigue sin cambios.
Kim expresó su esperanza de que las relaciones entre EE.UU. y Corea del Norte, y la desnuclearización de la península se resuelvan etapa por etapa y a través de un diálogo y una negociación efectiva y constructiva.
HispanTV.es
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