Unos diez palestinos se aproximaron a la valla fronteriza que separa Gaza de Israel cerca de la localidad de Rafah, en el sur de la franja palestina. Según el relato del Ejército israelí, a pesar de que los soldados estaban en alerta, el grupo consiguió pasar la valla y llegar a uno de los puestos donde se sitúan tiradores militares cuando hay protestas.
El puesto estaba vacío y los palestinos lo incendiaron y después volvieron a Gaza. El Ejército aseguró haber tenido constancia de lo que ocurría en todo momento, pero se desconoce por qué no actuó para impedir la entrada de los palestinos y el incendio del puesto.
Esta no es la primera vez que los palestinos consiguen entrar en Israel. A finales del pasado marzo, tres palestinos armados con granadas y cuchillos penetraron en Israel y fueron arrestados cerca de la base militar de Tze'elim.
Unos días antes, un grupo de palestinos se infiltró en Israel e intentó quemar vehículos militares.