El británico Rob Hobson, un nutricionista y escritor de libros sobre comida saludable, asegura que el cacao en polvo o crudo no solo es beneficioso para nuestro ánimo, sino que también ayuda al cerebro, el corazón y la presión arterial.
En concreto, este especialista recomienda elegir chocolates negros con más de un 70 % de ese alimento porque tienen más antioxidantes que casi todos los demás y son ricos en magnesio, hierro y zinc.
Además, es capaz de levantarnos el ánimo gracias a sustancias como la feniletilamina, el triptófano —se convierte en serotonina, la hormona de la felicidad— y la teobromina, cuyo efecto es similar a la cafeína.
En concreto, estudios de la actividad encefálica muestran que beber cacao al menos cinco días a la semana aumenta el flujo de sangre en ciertas partes del cerebro y, con ello, mejora el conocimiento y la memoria.
El pueblo guna no sufre hipertensión arterial
Los investigadores notaron que el pueblo guna, localizado en Panamá y Colombia, no sufren hipertensión arterial debido que sus integrantes toman cacao a diario... y pierden esa defensa cuando interrumpen el proceso.
De hecho, los flavonoides de esa semilla mejoran la elasticidad de las arterias y reducen el riesgo de sufrir ataques cardiacos, ya que previenen la formación de coágulos.
Finalmente, esos metabolitos aumentan la disponibilidad de óxido nítrico en la sangre, circunstancia que dilata los vasos sanguíneos y disminuye la fuerza con que la sangre golpea las arterias.
Eso sí, ningún exceso es bueno: tomar demasiado cacao puede generar sobrepeso y afectar tanto a la circulación sanguínea como a la salud mental.
RT.actualidad