Según el Consulado, AzVision informa que el evento, organizado por el Consulado General, contó con la presencia de miembros de la comunidad azerbaiyana, cónsules generales de varios países extranjeros, conocidas figuras científicas y culturales, periodistas, así como líderes de las comunidades judía, turca, pakistaní, iraní, vietnamita y hispana.

Al inaugurar el evento, el cónsul general de Azerbaiyán en Los Ángeles, Nasimi Aghayev, dio la bienvenida a los invitados y habló sobre la historia del genocidio cometido contra los azerbaiyanos en 1918. Aghayev señaló que luego de la Revolución de Octubre en Rusia en 1917, Bakú fue invadida por las fuerzas bolcheviques que creó una alianza con los dashnaks armenios. "Bakú fue el objetivo principal de los bolcheviques debido a sus vastas reservas de petróleo. Como dijo Vladímir Lenin: "El bolchevismo no puede sobrevivir sin el petróleo de Bakú", dijo Aghayev. "Sin embargo, el principal obstáculo para el control pleno y sin obstáculos de Bakú fue la población musulmana azerbaiyana de la ciudad. Entonces los bolcheviques y los dashnaks armenios decidieron recurrir a la "solución final" del "problema". Entre el 30 de marzo y el 2 de abril de 1918, los dashnaks armenios, asistidos por bolcheviques (liderados por el comunista armenio Stepan Shaumyan), sometieron a toda la población musulmana de Bakú a un genocidio brutal, matando al menos a 12,000 azerbaiyanos, muchos de los cuales eran mujeres y niños. Así fue como se cometió uno de los primeros genocidios del siglo XX ", dijo Aghayev. "La violencia contra los azerbaiyanos no solo estaba contenida en Bakú. Miles de azerbaiyanos fueron masacrados en otras regiones de Azerbaiyán, incluso en el distrito de Guba. Los musulmanes no fueron las únicas víctimas. Alrededor de 3.000 judíos de las montañas azerbaiyanos también fueron asesinados por armenios dashnaks. ¿La razón? Porque los judíos se pusieron del lado de los musulmanes azerbaiyanos, con quienes habían vivido en armonía durante siglos, contra la ocupación bolchevique-Dashnak de Azerbaiyán ", agregó el Cónsul General. Aghayev hizo hincapié en que en 2007 se desenterró una fosa común que contenía huesos y cráneos de muchas víctimas judías y musulmanas del Genocidio de Guba de 1918 cerca de la Ciudad Roja Judía en Guba.

Refiriéndose a los informes concretos del New York Times y Le Temps, así como de los cables diplomáticos franceses de 1920, Aghayev mencionó que la masacre de los civiles azerbaiyanos continuó hasta la década de 1920.

"A pesar de este genocidio de 100 años, así como de la ocupación internacionalmente condenada y la limpieza étnica total del 20 por ciento del territorio soberano de Azerbaiyán por parte de Armenia hace 25 años, no estamos enseñando odio a nuestros niños. No estamos enseñando a nuestros hijos a odiar. Estamos enseñando a la generación joven los valores de tolerancia, paz y armonía y multiculturalidad ", concluyó Aghayev.

En su discurso, el periodista estadounidense Raoul Lowery Contreras, autor de los libros publicados en California "Asesinato en las montañas: crimen de guerra en Jodyalí y el conflicto de Nagorno Karabaj" y el "lobby armenio y política exterior de EE.UU.", mencionó que realizó una investigación exhaustiva sobre el Genocidio de Marzo de 1918. Hizo hincapié en que en ese entonces Bakú tenía solo 56,000 población musulmana azerbaiyana (de una población general de 200,000 habitantes). "Así que la masacre de 12,000 de ellos significó que uno de cada cinco azerbaiyanos fue asesinado en marzo de 1918. Este fue un verdadero genocidio", concluyó Contreras.

Después de los discursos, los líderes de la fe musulmana, cristiana y zoroastriana leyeron oraciones para honrar a las víctimas del Genocidio de Marzo, expresando la esperanza de que tales tragedias nunca vuelvan a repetirse.
 
Posteriormente, el pianista estadounidense, Jason Abrams, la violinista azerbaiyana, Elvina Gurbanova y la joven vocalista azerbaiyana, ganadora de muchos concursos internacionales de música, Emin Eminzade, interpretaron composiciones azerbaiyanas y de música clásica, que fueron recibidas con mucho aplauso por parte del público.

Sevda Bakirova

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