La carta revela convincentemente las falsificaciones, expresadas por el presidente armenio Serzh Sargsyán el 24 de enero de 2018 desde la tribuna de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa.

Representante Permanente de Azerbaiyán informa que mediante el uso de una versión falsa de los hechos históricos y argumentos legales falsos, Armenia está una vez más tratando de engañar a la comunidad internacional, para ocultar su política de agresión y cometió contra el pueblo de Azerbaiyán y sus crímenes.

Con respecto a los aspectos históricos, la carta recuerda que el reasentamiento de armenios en la región de Nagorno-Karabaj de Azerbaiyán y el Cáucaso Sur en su conjunto se inició en el siglo XIX bajo la política colonial zarista dirigida a cambiar el vigente en ese momento la composición demográfica y la estructura territorial. Se observa que en 1978, con motivo del 150 ° aniversario de su reasentamiento en la región de Nagorno-Karabaj de Azerbaiyán, los armenios instalaron un monumento a Maraga-150. Sin embargo, en 1988, inmediatamente después de que Armenia presentara abiertamente demandas en este territorio de Azerbaiyán, destruyeron este monumento.

Se hace hincapié en la impuesta por los cambios demográficos en la región se han creado las condiciones previas para la inestabilidad a largo plazo, la tensión y el conflicto, que se acompaña de matanzas y expulsión de población azerbaiyana forzada. Se ha informado de que los combates en 1905 y 1918 se cobró la vida de miles de personas, y el 31 de marzo, Azerbaiyán se celebra el Día de Genocidio, de azerbaiyanos en la memoria de los miles de civiles asesinados por los armenios en 1918.

Se llama la atención sobre las declaraciones del presidente armenio sobre la política presuntamente decidida de Bakú en el período soviético para reducir la población de la población armenia en Nagorno-Karabaj. Al mismo tiempo, como se señala en la carta, se mantiene en silencio el hecho de que la población de Armenia disminuye inevitablemente. Por lo tanto, refiriéndose al informe del Servicio Nacional de Estadística de Armenia de 2017, se informa la reducción de la población de Armenia de 3,514,900 personas en 1993 a 2,986,100 personas en 2017.

En respuesta a la parte armenia junto insinuaciones sobre los sucesos Sumgayit, señala que los disturbios étnicos en varias partes de Azerbaiyán se planifican e implementan los ideólogos de Armenia y las organizaciones extremistas con el fin de ocultar las intenciones anexionistas armenio ilegales y los métodos violentos de su aplicación. Cabe recordar que durante los disturbios en Sumgait uno de los organizadores y participantes de la violencia era un armenio Eduard Grigorian, más tarde condenado por los crímenes cometidos a una larga pena de prisión.

En la carta son las palabras de una entrevista a principios de Serzh Sargsyán en el genocidio de Joyalí que hablan por sí mismos y refutar cualquier negación de la responsabilidad de los crímenes cometidos por la parte armenia en esta ciudad y en otros territorios ocupados de Azerbaiyán.

La versión armenia de los eventos en primera línea en abril de 2016 también es completamente refutada. "En realidad, lo que sucedió entonces fue una consecuencia directa y una continuación de la política armenia de usar la fuerza contra Azerbaiyán y la ocupación de sus territorios", dice la carta.

Además, las especulaciones armenias sobre los derechos humanos y la autodeterminación son fuertemente rechazadas.

Cabe recordar que la comunidad internacional ha reiterado su indignación por la propaganda descarada por los dirigentes armenios las ideas odiosas de superioridad racial, la incompatibilidad étnica y religiosa, y el odio hacia Azerbaiyán y otros países vecinos, prevalece en el espíritu armenio de la intolerancia y llevado a cabo por ese país las políticas discriminatorias y práctica.

También se subraya que Armenia distorsiona el principio del derecho de los pueblos a la libre determinación. De hecho, como se señala en la carta que la política de Ereván no tiene nada que ver con el principio de autodeterminación, consagrado en la Carta de las Naciones Unidas, el Acta Final de Helsinki de 1975 y otros documentos internacionales. Se hace hincapié en que las acciones de Armenia llama "el ejercicio del derecho a la autodeterminación", el Consejo de Seguridad de la ONU y otras organizaciones internacionales están excepcionalmente calificados como uso ilegal de la fuerza y ​​la comisión de otros delitos graves.

En conclusión, se observó que el objetivo principal del proceso de paz en curso que se llevó a cabo de conformidad con las resoluciones 822 (1993), 853 (1993), 874 (1993) y 884 (1993) del Consejo de Seguridad de la ONU, es proporcionar una retirada inmediata, completa e incondicional de Armenia las fuerzas armadas de la región de Nagorno Karabaj y de otros territorios ocupados de Azerbaiyán y el ejercicio por su población desplazada por la fuerza de su derecho inalienable a regresar.

Roksana Tarlan

Etiquetas: ONU   Azerbaiyan   Armenia