Batalla contra el cáncer: químicos rusos crean sistema ultraeficiente para su detección
Los tumores cancerígenos pueden ser encontrados en el cuerpo humano en las primeras etapas del desarrollo de varias maneras. Los médicos pueden detectar su rastro en moléculas específicas que las células cancerosas secretan en la sangre humana, o con la ayuda de la resonancia magnética y otros tipos de diagnóstico funcional.
Generalmente, los tumores difieren de los demás tejidos sanos del cuerpo en su densidad, actividad biológica, temperatura y otros parámetros, lo que nos permite encontrar incluso pequeños focos de cáncer, si contrastan con el resto de las imágenes de resonancia magnética del cuerpo.
Por esta razón, los científicos están desarrollando activamente sustancias especiales, los llamados agentes de contraste, que penetran en los tumores de cáncer, se acumulan allí y 'resaltan' durante la sesión de diagnóstico. Tal capacidad no es fácil de encontrar en elementos y moléculas, por lo cual su búsqueda continúa hasta nuestros días.
Las nanopartículas de hierro pueden ser la clave para combatir el cáncer
Mustafina y sus colegas dieron un gran paso en esta dirección, la creación de nanopartículas de gadolinio de metal, cuyos compuestos son ahora ampliamente utilizados en el diagnóstico de cáncer con MRI. El gadolinio puro es un material bastante tóxico para los seres humanos y otros animales, lo que hace que los científicos inventen métodos para 'empacar' los iones de este metal, muchos de los cuales reducen significativamente la eficacia de su trabajo.
La mayoría de estos problemas se pueden evitar por el envasado de gadolinio en nanopartículas químicamente inertes y seguras para el organismo, capaces de penetrar y acumularse en los tumores.
De acuerdo con los químicos de Kazán, las partículas desarrolladas tienen un extremadamente contrastantes efecto, superior a la fuerza de las mejores preparaciones de gadolinio modernas en 15-20 veces, mientras que son mucho más estables que ellos. Todo esto permite reducir la dosis del agente de contraste aproximadamente 20 veces durante el diagnóstico, lo que debería afectar positivamente la salud del paciente.
Como esperan los científicos, sus nanopartículas, desarrolladas con el apoyo de la Fundación de Ciencia Rusa, pronto encontrarán su aplicación en la práctica científica y médica, una vez que su seguridad para el organismo se confirme en el curso de ensayos clínicos.