Polvo del Sahara amenaza la salud de los cubanos
Según el investigador, esas nubes acopian una alta carga de componentes biológicos transmisores de enfermedades como hongos, virus, bacterias y ácaros.
Mojena confirmó que este suceso meteorológico fue percibido sobre el territorio cubano en marzo de este año, aunque suele presentarse entre mayo y agosto, con junio y julio como los meses a los que consideró "pico".
Confesó el investigador al diario oficial que en junio fue significativo el incremento de la presencia de estas nubes en las zonas occidental, central y oriental de la isla.
Subrayó que esas condiciones prevalecen con mayor o menor intensidad durante gran parte del actual verano, e incluso en la primera decena de agosto se estimaron valores de concentración de polvo en la atmósfera sobre Cuba muy superiores a las normales.
Como dato preocupante, reportó que este año alrededor del 66 % de los compuestos dañinos contenidos en esas nubes en la zona del Caribe corresponden a partículas PM 10 y PM 2,5.
La fuente describió que ante esta realidad el Centro de Pronósticos reforzó los contactos con el Instituto de Higiene y Epidemiología del Ministerio de Salud Pública para realizar diversos estudios y confirmar la influencia negativa del polvo en la calidad de vida de los ciudadanos.
Una sequía crónica presente en el Sahara desde la década de 1970 incrementó notablemente en ese extenso territorio el número de tormentas y la cantidad de polvo expulsado a la atmósfera, según Mojena.
El científico expresó optimismo en el enfrentamiento a este fenómeno natural pues las modernas tecnologías satelitales facilitan monitorear y estudia la ocurrencia de las tormentas de polvo en el desierto, así como su formación, posterior traslado y, finalmente, su caracterización.
Reportes del Citma indican que aunque en menor medida, a la isla puede llegar también polvo del desierto de Namibia y de los existentes en Asia, mientras que en el invierno también llegan ciertas cantidades procedentes de las amplias zonas despobladas de América del Norte.
El Ministerio de Salud Pública de Cuba anunció a finales de julio el inicio de una campaña de vacunación contra la influenza estacional que incluye la inmunización de 1,4 millones de personas.
Figuran entre los protegidos con esta medida profiláctica los lactantes de seis meses hasta niños menores de dos años y mujeres gestantes, entre otros, se informó.
Precisó el Minsap que esta campaña se extenderá hasta el 30 de septiembre y tiene el objetivo de disminuir la morbilidad grave por influenza y la mortalidad por neumonía en los grupos seleccionados.Sputnik