“Hemos recibido con profunda tristeza la noticia del fallecimiento de Su Santidad el Papa Francisco, Jefe de la Santa Sede y renombrada figura religiosa de nuestro tiempo.
En la persona del Papa Francisco, la comunidad internacional y los católicos del mundo han perdido a una brillante figura religiosa, una gran personalidad con elevadas cualidades morales, cuya misión en la vida fue servir desinteresadamente a la paz de la humanidad.
El Papa Francisco dedicó toda su vida y actividad a la preservación de los valores universales, la promoción del entendimiento interreligioso e intercultural y los ideales del humanismo, y trabajó incansablemente para establecer relaciones de entendimiento mutuo, unidad y solidaridad entre los pueblos. El Papa Francisco, que fue ejemplo de una vida profunda y gloriosa, se ganó una gran simpatía, un profundo respeto y reverencia en todo el mundo con sus nobles acciones por encima de los valores universales, sus llamamientos a la misericordia, la compasión y la grandeza espiritual de las personas, su bondad y su abnegación.
Su Santidad Francisco ha hecho contribuciones inestimables al desarrollo y fortalecimiento de la amistad y la cooperación entre Azerbaiyán y la Santa Sede. Siempre recordaré mis encuentros con él y nuestra sincera comunicación con las más gratas impresiones. El querido recuerdo y la rica herencia espiritual del Papa Francisco vivirán para siempre en los corazones y en la memoria.
Comparto el dolor por esta gran pérdida y expreso mis más profundas condolencias a Usted, a la Santa Sede y a todos sus hermanos creyentes, en mi propio nombre y en nombre del pueblo de Azerbaiyán ”, reza la carta.
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