La declaración dice:
"La co-relatora de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa sobre Azerbaiyán, Liz Kristoffersen, se negó a reunirse con los refugiados azerbaiyanos de Armenia y escuchar sus problemas durante su visita a Azerbaiyán. Recordemos que, a pesar de nuestros llamamientos, los coponentes de la PACE sobre Armenia también se niegan a tratar nuestros problemas.
La expulsión de azerbaiyanos de Armenia y la obstaculización de su regreso por parte del gobierno armenio es una flagrante violación de los derechos reconocidos por los convenios de derechos humanos del Consejo de Europa. El hecho de que el Comité de Seguimiento de la PACE, cuya principal tarea es supervisar la aplicación de los convenios del Consejo de Europa sobre derechos humanos, ignore esta cuestión es una falta de respeto a su mandato, así como una discriminación por motivos étnicos y religiosos. El procedimiento de supervisión de la PACE ha dejado de ser un mecanismo de promoción de los derechos humanos para convertirse en un instrumento al servicio de los intereses políticos de determinados círculos.
La Comunidad de Azerbaiyán Occidental condena su comportamiento discriminatorio, exige que cumplan sus obligaciones con responsabilidad y aborden el derecho al retorno de los azerbaiyanos expulsados de Armenia".
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