Los manifestantes actúan en la carretera Lachin-Khankandi. Corean consignas en azerbaiyano, inglés y ruso para detener el terror ecológico. Los manifestantes afirman que continuarán su protesta hasta que se cumplan sus demandas.

Los manifestantes, como de costumbre, no obstruyeron la circulación de los vehículos utilizados con fines humanitarios. Las fuerzas del orden de la zona organizaron todas las medidas de seguridad al más alto nivel.

El tiempo fue inestable durante el día, con lluvias intermitentes en Shusha. A pesar de todo, los ecoactivistas se mostraron firmes en sus reivindicaciones. La prolongación de la acción tampoco afecta a su voluntad. Cabe señalar que los manifestantes no están impidiendo la circulación de los vehículos utilizados con fines humanitarios. Las informaciones publicadas en la prensa armenia según las cuales los manifestantes habrían bloqueado la carretera Khankandi-Lachin y no dejan pasar a los vehículos de abastecimiento es otra desinformación del bando contrario.

Cabe destacar que como resultado de las conversaciones mantenidas con el mando del contingente ruso de mantenimiento de la paz los días 3 y 7 de diciembre del año pasado, un grupo de especialistas del Ministerio de Economía, Ecología y Recursos Naturales de Azerbaiyán, del Servicio Estatal de Cuestiones de Propiedad dependiente del Ministerio de Economía y de AzerGold se unieron a la misión rusa de mantenimiento de la paz y debían llevar a cabo una supervisión inicial de la explotación ilegal de recursos minerales en el territorio de Azerbaiyán, donde el contingente está desplegado temporalmente. Sin embargo, debido a la inacción de las fuerzas de mantenimiento de la paz, la supervisión no se llevó a cabo. En protesta por ello, los ecoactivistas azerbaiyanos iniciaron el 12 de diciembre una acción pacífica en la carretera Lachin-Khankandi, que atraviesa el territorio de Shusha.

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