Según la información, Rubik desapareció en un camión perteneciente a las fuerzas de paz rusas. En ese automóvil se transportaba la ropa inservible de los soldados que servían en el contingente de mantenimiento de la paz. Entre calcetines sucios, pantalones y quién sabe qué más, con una respiración profunda Vardanyan cruzó primero a Armenia, y de allí a Moscú.
Todo sucedió como dijo el presidente de la República de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, en una entrevista con los canales de televisión locales: "... Pueden ir: o pueden ir solos, nadie los estorbará, o pueden pasar por debajo de la lona de las camionetas de los pacificadores, también pueden ir en bus. El camino está abierto”.
Por lo tanto, el "proyecto Vardanyan" puede considerarse ya en fracaso. Si quiere volver a Karabaj bajo alguna carga sucia otra vez, esta vez será necesario hablar de otra manera...
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