Un cese de las hostilidades y un nuevo acuerdo para la evacuación de Alepo han salido de las negociaciones mantenidas en la madrugada de este jueves, tras el fracaso del pacto para la salida de civiles y militantes que tenía que haber comenzado a aplicarse ayer a primera hora y que degeneró durante el día en ruptura del alto el fuego y regreso de los bombardeos.

"La operación para organizar la salida de hombres armados del este de Alepo ha comenzado", señaló una fuente oficial siria a la agencia Reuters. El Comité Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Árabe de Siria han aclarado en un comunicado que tienen diez ambulancias preparadas en la ciudad, pero que la evacuación aún no ha comenzado.

Una fuente rebelde aseguró a la misma agencia que un nuevo alto el fuego ha entrado en vigor a las 2:30 hora local (00.30 GMT) y varios testigos de la ciudad relatan que los bombardeos han cesado esta madrugada.

A primera hora de la mañana de este jueves, rebeldes sirios indicaron a la Agencia France Presse la existencia de un nuevo acuerdo de evacuación. Poco después, un medio militar de Hezbolá, partido-milicia libanés que combate en Siria junto con las fuerzas leales al presidente El Asad, confirmó el pacto para la salida "en las próximas horas" de fuerzas rebeldes de Alepo, segunda ciudad del país. "Contactos intensivos entre las partes responsables involucradas en las negociaciones han llegado a la reconsolidación de un alto el fuego para la salida de combatientes armados de los distritos orientales en las próximas horas", indicó la unidad en un comunicado.

El acuerdo inicial, pactado entre Rusia y Turquía, preveía que la población civil y los enfermos y heridos fuesen los primeros en ser evacuados y los combatientes podrían abandonar después la ciudad con sus armas ligeras en dirección a zonas rurales próximas o de la provincia de Idlib bajo control de la oposición.

El acuerdo quedó suspendido ante las nuevas condiciones impuestas por el Ejército y sus aliados chiíes, según un portavoz insurgente. El Gobierno del presidente Bachar Al Asad había reclamado a las milicias de la oposición que entregasen una lista con el nombre de las 15.000 personas que pretenden ser evacuadas para poder identificar entre ellos eventuales rehenes y prisioneros. Los rebeldes temían que el régimen ejecute a los combatientes de milicias radicales e interne en campos de detención a civiles que considere sospechosos.ElPais

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