Ambos funcionarios "reconocieron que históricamente México ha mantenido buenas relaciones con los principales partidos políticos de EEUU, así como con sus líderes y representantes en el Congreso", indica el reporte oficial. La secretaria de Relaciones Exteriores, sostuvo reuniones con otros líderes clave del Congreso, en la cual reiteró que el gobierno mexicano mantendrá esta tradición con la nueva administración de Donald Trump.

Ruiz Massieu también abordó con el senador demócrata Ben Cardin asuntos de la relación bilateral y política exterior regional, y "resaltó la importancia y beneficios para ambos países del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)", que es objetado por el presidente electo de EEUU Donald Trump. La jefa de la diplomacia mexicana se reunió asimismo con la Asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, la embajadora Susan Rice, para dialogar sobre competitividad, seguridad y migración "desde una perspectiva integral y de responsabilidad compartida". En otra reunión con el Grupo Asesor sobre Derechos Civiles de los Mexicanos en Estados Unidos (MCRAG, en inglés), representantes de las principales organizaciones de defensa de los derechos civiles definieron mecanismos de colaboración para la defensa de la comunidad mexicana en EEUU.

Finalmente, Ruiz Massieu sostuvo un encuentro con miembros de la Fundación Heritage, centro de investigación sobre políticas públicas, sobre "la importancia de la relación bilateral en temas de competitividad, desarrollo económico y comercio". En la cita la funcionaria del gobierno de Enrique Peña Nieto señaló que, contrario a lo pregonado por Trump, "la migración neta entre México y Estados Unidos es cero". El comercio bilateral alcanzó 531,000 millones de dólares en 2015 y el 85% de estos intercambios se hacen por vía terrestre, en una frontera con más de un millón de cruces diarios de personas y 437.000 vehículos.
Sputnik

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