Mientras la pandemia de coronavirus pone en peligro a miles de millones de personas, a la vez que el hambre aumenta en el mundo y el cambio climático afecta a la naturaleza, un grupo de multimillonarios está invirtiendo gigantescas fortunas en sus propias empresas de viajes espaciales.
David Beasley, director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, afirmó el pasado viernes que ese dinero podría tener un mejor uso e instó a Jeff Bezos, Richard Branson y Elon Musk a que contribuyan a salvar a millones de personas que corren el riesgo de morir de hambre.
El también político estadounidense manifestó en su cuenta de Twitter que está "muy emocionado" al ver a dichos empresarios competir "por quién llega primero al espacio", pero subrayó que le encantaría "verlos unirse para salvar a los 41 millones de personas en la Tierra que este año están al borde de la hambruna". "Solo se necesitan 6.000 millones de dólares. ¡Podemos resolver esto rápidamente!", detalló.
Beasley agregó que con solo el 5 % del aumento del patrimonio neto de Musk, fundador de SpaceX y Tesla, o con 10 % del incremento del capital neto de Bezos, director ejecutivo de Amazon, durante la pandemia, se ayudaría a todos aquellos que en 43 países están en grave riesgo de morir de hambre.
"Durante la pandemia de covid-19, el incremento del patrimonio neto de los 2.275 multimillonarios del mundo fue de más de 5.200 millones de dólares al día. ¿Es mucho pedir el aumento de la riqueza de un solo día para salvar a 41 millones de personas que están a punto de morir de hambre?", subrayó.
Este año se han registrado condiciones de hambruna en Etiopía, Madagascar, Sudán del Sur y Yemen, así como en algunas zonas de Nigeria y Burkina Faso.
En 2019, 27 millones de personas estaban al borde de la hambruna, según el PMA, y desde 2020, con la pandemia de covid-19, ha empeorado la situación.
Los precios mundiales de los alimentos subieron en mayo a sus niveles más altos en una década, según datos de la ONU. Los de productos básicos como cereales, semillas oleaginosas, lácteos, carne y azúcar crecieron conjuntamente en 40 %, en comparación con los niveles del año anterior.
Según el Programa Mundial de Alimentos, alrededor del 9 % de la población mundial, equivalente a casi 690 millones de personas, se acuesta con hambre cada noche.
Etiquetas: