Las autoridades de Bangladesh han evacuado a cerca de dos millones de personas de las áreas de costa del país por la aproximación del ciclón Roanu, que según las previsiones tocará tierra este sábado, un hecho que también ha provocado que se decretase el estado de alerta en los países vecinos de India y Birmania. En India, el segundo país más poblado del mundo, la población residente en las zonas bajas del estado Andhra Paesh también ha sido trasladada.

La tormenta ha provocado lluvias torrenciales esta semana y dos importantes deslizamientos de tierra en Sri Lanka, país en el que se teme que puedan haber perdido la vida unas 150 personas. Los deslizamientos también han obligado a más de 223.000 ciudadanos a huir de sus hogares.

El Departamento Meteorológico de India ha colgado un comunicado en su página web en el que advierte de la "gran probabilidad" de que las zonas bajas situadas en los distritos de la costa acaben siendo inundadas por las enormes que puede provocar la tormenta, superiores a los dos metros respecto a la marea regular. Este organismo también ha anunciado que durante la noche del viernes la tormenta se desplazará a lo largo de la costa este del país y se transforme en un ciclón de alta intensidad durante las próximas 24 horas. La previsión india es que Roanu cruzará la costa sur de Bangladesh, pero ya convertida en una tormenta con una fuerza ciclónica menor.

El Ministerio de Desastres bangladeshí ha informado a los periodistas de que el país ya ha tomado "todo tipo de medidas" para, en la medida de lo posible, minimizar las pérdidas. Sin embargo, aunque los daños materiales fuesen mínimos, las arcas públicas ya han asumido un coste importante derivado del traslado de parte de la población hacia puntos alejados del ojo de la tormenta.

Bangladesh es uno de los países más pobres del sur de Asia y ha sufrido importantes zarpazos de la naturaleza en los últimos años. En 2007, más de 3.000 personas fallecieron tras el paso del ciclón Sidr y en 2009 otras 200 perdieron la vida a causa del Aila.

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