Cerca de cien empleados del Metro de Moscú han sido despedidos debido a la filtración de la base de datos de los partidarios del líder opositor, Alexéi Navalni. Así lo ha anunciado en declaraciones al canal de televisión Dozhd, Vasili Sheliakov, vicepresidente del Sindicato Independiente de Trabajadores del Metro moscovita.

Resulta que la organización de Navalni recogió recientemente, a modo de sondeo, datos de los ciudadanos dispuestos a apoyar las acciones de protesta en apoyo del principal disidente del país, que cumple actualmente una pena de prisión de dos años y cinco meses. Pero hackers al servicio del Kremlin lograron entrar en la lista y publicaron su contenido.

Así que las autoridades rusas saben ahora perfectamente qué personas en concreto respaldan a Navalni. Entre ellos, según Sheliakov, hay cerca de un centenar de trabajadores del metro que ya han sido despedidos. El dirigente sindical no sabe si en la lista hay más empleados del metro, por lo que no descarta que más gente pueda ir a la calle. Según sus cálculos, los despidos podrían elevarse a las 200 personas.

Entre ellos hay maquinistas del convoy, jefes de estación, encargados de la escaleras mecánicas y otros muchos trabajadores. Los afectados pusieron al corriente al sindicato mediante llamadas telefónicas, correos electrónicos o redes sociales.

Hoy lunes está prevista una reunión en la oficina sindical del Metro de Moscú, en la que se tramitará íntegramente la lista de personas que han comunicado su despido por su apoyo a Navalni, y también se comenzarán a preparar las denuncias por la rescisión ilegal del contrato de trabajo, bien de forma colectiva o individual en cada caso.

Por otro lado, el Tribunal Municipal de Moscú tenia hoy previsto comenzar a examinar la demanda interpuesta por la Fiscalía moscovita para lograr que las organizaciones de Navalni sean reconocidas como «extremistas», pero la vista fue suspendida y continuará a puerta cerrada de aquí al 9 de junio. De cara a las elecciones legislativas del próximo mes de septiembre, las autoridades rusas se proponen ilegalizar el movimiento de Navalni e impedir que pueda presentar candidatos.

abc

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