El rey de Jordania, Abdalá II, se refirió este miércoles a los acontecimientos, que tuvieron lugar a finales de la semana pasada, calificándolos como un intento de sedición que involucró a su medio hermano, Hamzah bin Hussein, que aunque resuelto, le causó ira, dolor y conmoción, informa AP.
"El desafío de los últimos días no fue el más difícil o peligroso para la estabilidad de nuestra nación, pero para mí fue el más doloroso", explicó el monarca. "La sedición vino desde dentro, [...] y nada se compara con mi conmoción, dolor e ira como hermano, jefe de la familia hachemita, y líder de este pueblo", lamentó el soberano.
Al mismo tiempo, Abdalá II informó que Hamzah bin Hussein, expríncipe heredero jordano, que no ha sido visto ni escuchado en días, estaba "con su familia en su palacio, bajo mi cuidado".
¿Qué pasó en Jordania?
El sábado pasado las autoridades jordanas detuvieron a más de una docena de personas, incluido un miembro de la familia real. Hamzah bin Hussein afirmó haber sido puesto bajo arresto domiciliario en un video enviado a los medios de comunicación.
El Gobierno de Jordania acusó al medio hermano del rey de conspirar con la ayuda de fuerzas del exterior para "desestabilizar el país". Posteriormente, Hamzah bin Hussein firmó una carta en la que se puso "en las manos del rey", jurándole lealtad.
Este lunes las autoridades del reino prohibieron publicar cualquier información sobre el caso. La investigación de los hechos aún continúa abierta.
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