El ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, ha sostenido este lunes que el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, podría "coreografiar las medidas que deben ser tomadas" por Washington y Teherán para resolver el enfrentamiento diplomático sobre quién debe dar el primer paso y así volver a los términos del acuerdo nuclear de 2015.

En una entrevista con la presentadora de CNN Christiane Amanpour, Zarif propuso a Europa como mediador por creer que dispone de un buen mecanismo para "sincronizar o coordinar lo que se puede hacer" para garantizar el pleno cumplimiento del acuerdo nuclear, del que EE.UU. salió en 2018 imponiendo sanciones contra la nación iraní.

Mientras Teherán produce medio kilo de uranio enriquecido cada día tras reanudar el enriquecimiento con un nivel de pureza del 20 %, muy por encima del 3,67 % permitido por el acuerdo de 2015, el jefe de la diplomacia iraní reiteró que fue EE.UU. el que salió de aquel pacto y si bien el Gobierno de Irán ya había demostrado que es capaz de atenerse a sus compromisos, ahora le toca a Washington hacerlo, mediante el levantamiento de todas las sanciones.

"EE.UU. tiene que volver a cumplir con el acuerdo e Irán estará listo inmediatamente para responder", aseguró el ministro, precisando que su país podría volver a cumplir con sus compromisos previos "en menos de un día".

"Algunos pueden tardar unos días o semanas [en implementarse], pero no se tardará más de lo que tardaría EE.UU. en implementar los decretos necesarios para poner en funcionamiento el petróleo, sistema bancario, transporte y otras esferas que el presidente Trump violó", señaló Zarif.

El Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, declaró que Irán podría estar a unas semanas de poder producir suficiente material fisible para crear un arma nuclear si sigue ignorando las restricciones del acuerdo nuclear. Según Blinken, EE.UU. está dispuesto a volver a someterse a la letra del acuerdo de 2015 si Irán hace lo propio.

A principios de diciembre, el Consejo de Guardianes de Irán aprobó una ley que suspende las inspecciones de la ONU en sus instalaciones nucleares y obliga al Gobierno a aumentar el enriquecimiento de uranio más allá del límite establecido en el acuerdo nuclear de 2015, en caso de que las sanciones occidentales no se alivien en dos meses.
El acuerdo nuclear limita al 3,67 % la pureza fisionable a la que Irán puede refinar uranio, muy por debajo del 20 % logrado antes del pacto y todavía más del 90 % requerido para desarrollar armas nucleares. Teherán superó el límite de 3,67 % en julio de 2019 y el nivel de enriquecimiento se mantuvo desde entonces estable en 4,5 %.

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