Irán incluyó a Donald Trump el 19 de enero, o un día antes del cese de su mandato presidencial, en la "lista negra", en que figuran:
el secretario de Estado, Mike Pompeo,
los jefes del Pentágono, Mark Esper y Christopher Miller,
la directora de la CIA, Gina Haspel,
y otros funcionarios que integraban la Administración Trump.
"Esta lista —también puede haber otras— se elaboró de acuerdo con la ley referente a las personas que efectúan actividades hostiles contra Irán", dijo el diplomático.
También señaló que ninguno de los ciudadanos y los diplomáticos iraníes tiene el derecho a contactar con los miembros de la antigua Administración Trump, ni en materia de vínculos económicos.
En dicha lista figuran asimismo unos individuos implicados en el asesinato del general Qasem Suleimaní, comandante de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán, dijo Baharvand y agregó que Teherán insistirá en que la Interpol los detenga y extradite a Irán, si ellos no contratan a abogados.
Irán introdujo sanciones contra Trump y otras personalidades oficiales de EEUU de acuerdo con la ley de lucha contra "las violaciones de los derechos humanos y la actividad aventurera y terrorista de EEUU en la región".
La Cancillería iraní culpó a los funcionarios en cuestión de violar los derechos humanos, apoyar al terrorismo y realizar actividades inhumanas y terroristas apuntadas contra Irán y los ciudadanos iraníes.
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