El presidente de EE.UU., Donald Trump, comenzó su discurso virtual ante el 75.º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), arremetiendo contra Pekín. Dijo que EE.UU. ha librado “una feroz batalla contra un enemigo visible: el virus de China”, en referencia al nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, y pidió a las Naciones Unidas que “hagan que el gigante asiático se responsabilice de sus actos”.

En una sesión virtual del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), celebrada el jueves, el representante permanente de China ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Zhang Jun, respondió a las observaciones de Trump, diciendo: “¡basta ya!”.

Zhang cuestionó cómo EE.UU. ha registrado, hasta la fecha, más de 7 millones de casos de contagios con el virus temible y más de 200 mil muertos, cifras mayores que cualquier otro país, a pesar de contar con las tecnologías médicas más avanzadas.

“Debo decir: ¡basta ya! Usted ya ha creado suficientes problemas para el mundo (…) Si hay que pedir cuentas a alguien, deben ser unos políticos estadounidenses (…) EE.UU. debe entender que una superpotencia debe actuar como una superpotencia”, indicó Zhang.

El diplomático chino hizo énfasis en que EE.UU. “está completamente aislado (…) Es tiempo para despertarse”. La representación rusa ante la ONU también compartió en la misma sesión igual punto de vista.

El presidente chino, Xi Jinping, indicó el martes ante la AGNU que el mundo entero debe rechazar los intentos para “politizar” el brote del coronavirus, en una referencia implícita a EE.UU., que acusa a Pekín de crear el virus para dañar a las potencias occidentales.

La actual escalada de tensiones ha conducido a Pekín y Washington al borde de una nueva guerra fría. Varios analistas advierten que existe un riesgo inminente de que se produzca una “confrontación no planificada” entre ambos países con el paso de los días.

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