Este miércoles arrancó oficialmente en Chile la campaña electoral para el histórico plebiscito, en el que la ciudadanía decidirá si se cambia o no la Constitución heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
El plebiscito, que derivó de las demandas del estallido social que inició el 18 de octubre del 2019 en el país sudamericano, se llevará a cabo el próximo 25 de octubre. Los chilenos deberán responder a la pregunta "¿quiere usted una nueva Constitución?", marcando las opciones "apruebo" o "rechazo".
Desde ya, los partidos políticos legalmente constituidos, los parlamentarios independientes y las organizaciones de la sociedad civil pueden realizar su labor proselitista en favor de una u otra opción, confirmó el Servicio Electoral (Servel).
El protocolo del Servel
La campaña arranca en medio de la pandemia del nuevo coronavirus, en un país que, a la fecha, registra 402.365 contagiados y 10.990 fallecidos.
Por ello, previamente, el Servel estableció un protocolo para evitar mayores contagios por coronavirus.
"Se recomienda evitar las aglomeraciones, el contacto físico y respetar las restricciones sanitarias decretadas por la autoridad", dice el texto de este organismo.
La institución señala que se podrá hacer propaganda en lugares públicos, "que estén expresamente autorizados para ese propósito". Además, está permitido que en espacios abiertos haya activistas o brigadistas con banderas, lienzos u otros elementos no fijos, y se haga entrega de material impreso u otro tipo de objetos informativos.
También está autorizada la propaganda en medios de prensa escrita, electrónica y radioemisoras; así como en espacios privados, mediante carteles, afiches o letreros.
Este plebiscito, anteriormente, estaba pautado para el 26 de abril, sin embargo, debido a la pandemia, en marzo el Congreso lo aplazó para el 25 de octubre.
En enero, la Encuesta Nacional de Opinión Pública publicada por el Centro de Estudios Públicos (CEP) reveló que 67 % de los consultados está a favor de una nueva Constitución en Chile.
Pasos posteriores
En el plebiscito, además de decidir si aprueban o rechazan la nueva Constitución, los votantes deberán elegir en la papeleta qué mecanismo redactará el nuevo texto, si lo hace una Convención Constitucional —integrada por 155 personas electas por la ciudadanía— o una Convención Mixta (compuesta por 86 ciudadanos electos y 86 parlamentarios elegidos por el propio Congreso).
De ganar el "apruebo", el 11 de abril de 2021 los chilenos podrán elegir a los constituyentes que redactarán la Carta Magna.
Posterior a ello, y una vez instalada la Convención, esta tendrá un plazo de nueve meses para presentar la nueva Constitución, que podría ser prorrogable por tres meses más, en una sola oportunidad, en caso de necesitarlo.
En 2022, los chilenos podría volver a las urnas para ratificar o rechazar el texto resultante.
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