Este miércoles el Gobierno mexicano presentó un plan de reforma pensional con el cual se pretende reducir el número de semanas de cotización para recibir la pensión. 

El secretario de Hacienda de México, Arturo Herrera, detalló que "se va a elevar la tasa de reemplazo de los trabajadores en un promedio de 40% y los trabajadores que menos recibían, que tenían hasta cinco salarios mínimos, van a aumentar de un 31% a un 54% su tasa de reemplazo". 

El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) destacó que se propuso una edad mínima de 60 años para pensionarse y destacó que en promedio la pensión aumentará en un 40% para algunos trabajadores. 

En México apenas el 34% de los aportantes logra tener una pensión garantizada. Con esta reforma, la administración de AMLO aspira a elevar esa cifra al 82%. 

Dicho proyecto fue presentado ante el Congreso de México, el cual deberá tramitar su aprobación. 

Por su parte, Gustavo de Hoyos, presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), manifestó su respaldo a la iniciativa del Gobierno. 

"El sistema pensionario debe garantizar que toda persona que en su vida tenga una actividad económica lícita, goce de una pensión digna al momento de su retiro. Celebro que el Gobierno se adhiera a la iniciativa construida por las organizaciones de trabajadores y empleadores", escribió Gustavo de Hoyos en su cuenta de Twitter.

Es importante destacar que la seguridad social en México, a diferencia de otros países de la región incluye, entre otros, el apoyo a la vivienda, de modo que visto en su conjunto “el trabajador retirado tiene acceso a una vivienda y a una pensión por haber estado afiliado al Instituto Mexicano del Seguro Social, además de la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores y a la atención a la salud”, remarcó el Gobierno. 

anadolu

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