Muchos países europeos han demostrado que se pueden controlar los grandes brotes de COVID-19, mientras que América con más del 50% de los casos sigue siendo el epicentro mundial, dijo el lunes el jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
En uno de los tres encuentros web que ahora imparte por semana, Tedros dijo que todos los países están en riesgo de contraer el virus y que muchas naciones están perdiendo lo que habían ganado.
No todos los países se han visto afectados de la misma manera, señaló Tedros, al tiempo que advirtió a los líderes gubernamentales que no emitan mensajes contradictorios.
Añadió: "Si no se siguen los principios básicos, solo hay una forma de que esta pandemia se vaya. Va a empeorar cada vez más".
Tedros también dijo que este domingo 230.000 nuevos casos de COVID-19 fueron reportados en todo el mundo a la OMS, y casi el 80% de esas infecciones se reportaron en solo 10 países, y el 50% proviene de solo dos naciones.
"Aunque el número de muertes diarias se mantiene relativamente estable, hay mucho de qué preocuparse", subrayó el jefe de la OMS.
Los países de Europa y otros lugares han demostrado que es posible controlar grandes brotes y los líderes allí están abriendo sus sociedades, dijo Tedros.
Lo están haciendo "sobre la base de datos, paso a paso, con un enfoque integral de salud pública, respaldado por una sólida fuerza laboral de salud y aceptación de la comunidad", agregó.
Dijo que, sin embargo, también hay signos de aumentos peligrosos en los casos en varios países y las salas de los hospitales se llenan nuevamente.
"Parece que muchos países están perdiendo ganancias obtenidas ya que no se implementan o siguen medidas comprobadas para reducir el riesgo. Vemos esto en América, el sur de Asia y varios países de África", dijo Tedros.
El funcionario señaló que el epicentro del virus permanece en las Américas, donde se ha registrado más del 50% de los casos del mundo.
"Permítanme decir sin rodeos, demasiados países se encaminan en la dirección equivocada", dijo.
El virus sigue siendo el enemigo público número uno, pero las acciones de muchos gobiernos no reflejan esto.
"El único objetivo del virus es encontrar personas para infectar”.
"Los mensajes mixtos de los líderes están socavando el ingrediente más crítico de cualquier respuesta: la confianza", dijo el jefe de la OMS, y agregó que los gobiernos deben comunicarse claramente con sus ciudadanos y desplegar una estrategia integral centrada en suprimir la transmisión y salvar vidas.
anadolu
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