La portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, aseguró que el presidente Donald Trump trabaja en una reforma policial, la cual ha sido reclamada por los manifestantes desde hace dos semanas.
“Sabemos que existen injusticias en algunos temas, pero el presidente Trump sabe que, en principio, la mayoría de los agentes de Policía son buenas personas”, dijo McEnany durante una rueda de prensa.
McEnany defendió las declaraciones de Trump en las que este argumentó que la escena en la que dos agentes de Policía empujaban al suelo a un anciano de 75 años de edad en Buffalo, Nueva York, podría haber sido un montaje de Antifa.
La portavoz agregó que “había muchas preguntas en ese caso” y que el incidente estaba bajo investigación.
Por su parte, este martes Trump dijo que el anciano “podría ser un provocador de Antifa”.
Trump asegura que manifestante agredido por la Policía en Buffalo podría ser un "provocador de Antifa".
“El manifestante de Buffalo empujado por la Policía podría ser un provocador de Antifa. Martin Gugino, de 75 años, fue empujado después de aparentar que escaneaba las comunicaciones de la Policía para bloquear el equipo”, escribió Trump en Twitter.
El comentario se produjo cuatro días después de que estos dos policías de Buffalo fueran acusados de agresión. Se trata de Aaron Torgalski, de 39 años, y de Robert McCabe, de 32, quienes se declararon inocentes y fueron liberados sin fianza.
Gugino protestaba frente a la Alcaldía el pasado jueves y se acercó a los oficiales de policía, pero estos lo empujaron al suelo porque aparentemente estaba tratando de decirles algo.
En el video su cabeza se veía sangrando después de golpear el suelo. Según varios medios, el hombre todavía está en el hospital.
En relación con la enfermedad del coronavirus (COVID-19), McEnany aseguró que, según la coordinadora de la respuesta del Gobierno federal a la pandemia, Deborah Birx, las medidas adoptadas por la administración de Trump han prevenido la muerte de más de tres millones de personas.
McEnany señaló que otros estudios apuntaban a 50 millones de casos adicionales prevenidos gracias a las medidas preventivas implementadas por la administración Trump.
Las protestas en Estados Unidos, que ya llevan dos semanas, se generaron después de la muerte de George Floyd, un hombre afroamericano que falleció luego de que el expolicía Derek Chauvin se arrodillara sobre su cuello durante casi nueve minutos en medio de un arresto, hasta llevarlo a la asfixia.
La muerte de Floyd, el 25 de mayo, provocó una indignación generalizada contra la brutalidad policial y la injusticia racial que se ha evidenciado en continuas protestas en todo el país, que ocasionalmente se convirtieron en violencia y saqueos.
Trump culpó al grupo antifascista Antifa por los incidentes violentos y anunció que este sería designado como un grupo terrorista.
La muerte de Floyd, así como las repetidas escenas de represión policial contra los manifestantes, han dado lugar a un aumento del rechazo hacia la Policía, e incluso a la solicitud de que los departamentos de Policía sean disueltos por completo.
En Minneapolis, Minnesota, la ciudad donde murió Floyd, la mayoría de los miembros del Consejo de la Ciudad han dicho que apoyan la disolución del departamento de Policía, mientras que el alcalde, Jacob Frey, ha expresado su oposición a la propuesta.
anadolu
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